MADRID, 15 (EUROPA PRESS)
El precio medio de los carburantes ha encadenado esta semana su tercera alza consecutiva, tras la espiral bajista de los últimos meses que llevó al gasóleo y la gasolina a situarse en niveles por debajo de los anteriores al estallido de la guerra de Ucrania, a finales de febrero de 2022.
En concreto, el precio medio del diésel ha repuntado esta semana un 0,5% con respecto a hace siete días, para situarse en los 1,424 euros el litro, según datos del Boletín Petrolero de la Unión Europea (UE) recogidos por Europa Press.
Por su parte, el precio medio del litro de gasolina, que venía hace dos semanas de registrar caídas durante más de un mes, ha subido esta semana un 0,37%, para escalar hasta los 1,594 euros el litro.
Con estos últimos encarecimientos, el precio del litro de gasolina vuelve a situarse así por encima de los 1,594 euros que registraba antes del estallido de la guerra de Ucrania por la invasión rusa el 24 de febrero de 2022, aunque el diésel se mantiene por debajo de los 1,479 euros a los que ascendía en esas fechas.
La escalada en el precio de los carburantes por la crisis energética provocada por el conflicto bélico llevó al Gobierno a aprobar una bonificación mínima de 20 céntimos por litro de combustible para todos los ciudadanos, dentro de su plan de respuesta al impacto de la guerra en Ucrania.
Mientras, el diésel sigue por decimoctava semana seguida por debajo del precio de la gasolina. Se mantiene así en la situación habitual de antes de la invasión rusa de Ucrania, que provocó que el precio del gasoil fuese más caro que el de la gasolina de forma continuada desde agosto de 2022 y hasta mediados de febrero de este año, cuando se rompió esa dinámica.
En comparación con la primera semana de 2023, ya sin el descuento de 20 céntimos del año pasado aplicado por el Gobierno, la gasolina registra un ascenso del 0,69%, frente al abaratamiento del 14,2% del diésel.
De todas maneras, con estos niveles de precios, ambos carburantes se mantienen lejos de los máximos que tocaron el pasado verano, cuando en julio la gasolina alcanzó los 2,141 euros y el gasóleo los 2,1 euros.
Asimismo, la gasolina y el gasóleo siguen una semana más muy alejados del precio que marcaban (1,818 euros en el caso del primero y 1,837 euros para el segundo) antes de la entrada en vigor de la ayuda de 20 céntimos por litro que aprobó el Gobierno a finales de marzo del año pasado, y que, desde comienzos de 2023, solo se mantiene para el colectivo de profesionales, que incluye a transportistas, agricultores, navieras y pescadores.
En este contexto, este jueves el barril de Brent, de referencia en Europa, cotizaba en el entorno de los 74 dólares, mientras que el Texas americano se intercambia a unos 68 dólares.
El precio de los carburantes depende de múltiples factores, como su cotización específica (independiente de la del petróleo), la evolución del crudo, los impuestos, el coste de la materia prima y de la logística y los márgenes brutos. Además, la evolución en la cotización del crudo no se traslada directamente a los precios de los carburantes, sino que lo hace con un decalaje temporal.
MÁS BARATO EN ESPAÑA QUE EN EL ENTORNO.
Con estos niveles, el precio de la gasolina sin plomo de 95 se mantiene en España por debajo de la media de la Unión Europea, situada en 1,729 euros el litro, y de la eurozona, con un precio medio de 1,779 euros.
En el caso del diésel, el precio en España también es inferior al de la media de la UE, que es de 1,552 euros, y de la zona euro, donde marca un precio de 1,579 euros.