MADRID, 26 (EUROPA PRESS)
El presidente del Consejo Económico y Social (CES), Antón Costas, ha ensalzado la "primavera económica" que vive España desde la salida de la pandemia, aunque ha alertado del incremento de la pobreza y de las trabas que supone la vivienda para el crecimiento de la economía.
Estas son las principales conclusiones que ha deslizado el presidente del CES este miércoles en el Congreso, donde ha presentado la memoria sobre la situación socioeconómica y laboral de España en 2023 a los diferentes grupos parlamentarios.
Costas ha explicado que en términos macroeconómicos, la economía española ha mantenido en un nivel elevado desde que sufrió el colapso de la pandemia, y desde entonces mantiene la inercia que adquirió tras la crisis sanitaria.
"Todos los pronósticos, tanto de organismos de previsión internacionales como nacionales nos auguraban que a la salida de la pandemia nos enfrentaríamos con una recesión. Eso no fue así y de hecho la economía mantiene una inercia de crecimiento", ha remarcado en su intervención.
Este crecimiento continuo es a lo que el presidente del CES ha definido como "primavera económica", que también se extiende al empleo según el informe elaborado por el organismo. Sin embargo, dice Costas, esa primavera "no está calentando a todos" por igual.
Aquí es donde el también expresidente del Círculo de Economía de Barcelona ha advertido que, a pesar de este buen desempeño económico, se ha producido un aumento de la pobreza, y especialmente la pobreza infantil.
Por ese motivo, Antón Costas ha enfatizado en la necesidad de invertir más en materia de infancia, que además cataloga como la "mejor inversión" a acometer, pues tiene retornos "elevados" que se mantienen a lo largo de los años.
LA VIVIENDA "ESTRANGULA" EL CRECIMIENTO
La otra parte del problema reside en la vivienda, que según el CES puede empezar a ser un obstáculo y generar cuellos de botella en el desempeño económico de España.
"(La vivienda) está comenzando a ser no solo un problema social, en esto no hay por qué insistir, sino que puede estar comenzando a ser un mecanismo de estrangulamiento del crecimiento a medio y largo plazo", ha incidido Costas.
El presidente de la entidad ha explicado que los altos precios de la vivienda está impidiendo en muchos casos la movilidad laboral, por un lado, y por otro que esos altos precios están restando capacidad de compra a "una parte muy importante de la sociedad española".
HAY UN CAMBIO EN LA ECONOMÍA ESPAÑOLA
A pesar de estas dos advertencia, Antón Costas ha advertido sobre comportamientos que, a su juicio, podrían estar suponiendo un cambio en el modo en el que evoluciona la economía española.
Si antes España tenía un comportamiento de economía "maniaco depresiva" y se hundía mucho y durante mucho tiempo en periodos de recesión y crecían con mucha fuerza en tiempos de expansión, desde la crisis del coronavirus se está produciendo un cambio en las dos fases del ciclo.
Costas ha explicado que en la fase de caída iniciada con la pandemia, la economía española se resintió durante un breve periodo de tiempo y no acarreó una destrucción elevada de puestos de trabajo ni del tejido empresarial. Asimismo, la fase de crecimiento de la economía no está acompañada de "desequilibrios macroeconómicos" y sí por superávits en las balanzas de pagos, a excepción de la balanza energética.
Aunque ha admitido que esos superávits se producen desde hace ya una década, el presidente del CES ha incidido en que "hay muy pocas economías desarrolladas que estén manifestando este mismo comportamiento". "Hay una señal que nos está diciendo que algo está cambiando en la estructura y en el comportamiento de la economía española", ha remachado.