MADRID, 13 (EUROPA PRESS)
Adif ha preseleccionado la oferta ganadora para realizar el futuro diseño de la estación de Madrid-Chamartín Clara Campoamor, que se caracterizará por tres elementos arquitectónicos claves: las bóvedas, las terrazas y tres torres de oficinas.
La propuesta presentada por Esteyco, UNStudio y b720 Arquitectura se ha hecho con la mejor puntuación del jurado, por lo que previsiblemente se adjudicará el contrato de hasta 24,5 millones de euros, una vez validada la documentación y aprobada por el consejo de administración de Adif en las próximas semanas.
El proyecto sucederá a las actuaciones que ya está abordando la empresa pública en la estación para duplicar la capacidad de la alta velocidad y el vestíbulo de viajeros, ordenar flujos, facilitar la conexión con otros transportes urbanos, maximizar vías y andenes destinados a Cercanías y la red de media y larga distancia y su conexión con el aeropuerto.
Según Adif, la propuesta ganadora respeta la memoria histórica de Chamartín, recuperando las bóvedas como elemento singular e identificador de la estación, al mismo tiempo que los balcones urbanos (terrazas escalonadas) generan permeabilidad con la ciudad como prolongación de los parques situados a ambos lados del complejo.
La solución arquitectónica mantiene la tipología de marquesinas individuales en los andenes y da prioridad a la visión directa entre los andenes y la ciudad. De esta forma, en parte, se traslada la representatividad de la estación a los edificios no ferroviarios, las tres torres, que alojarán oficinas y tendrán una gestión patrimonial independiente del resto del complejo.
"Desde los edificios --a modo de vigilantes atalayas del ferrocarril-- se podrá disfrutar del tren, mientras que los viajeros sentirán que han llegado al corazón de una ciudad próspera, moderna y acogedora", defiende.
La propuesta ha obtenido por unanimidad la puntuación más alta de los nueve diseños finalistas presentados por las principales firmas de ingeniería y arquitectura del mundo, y valorados por un jurado integrado por 16 miembros que ha considerado aspectos como la funcionalidad ferroviaria, comercial y terciaria, la viabilidad constructiva, la accesibilidad e integración en la ciudad, la sostenibilidad ambiental, social y arquitectura de género.