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Caos en Disney+. La plataforma de streaming ha puesto en jaque la renovación y el bolsillo de miles de sus suscriptores en todo el mundo. Y lo ha hecho obligando a sus antiguos clientes a pagar 89,99 euros anuales, en lugar de los 69,99 euros acordados en un primer momento.
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Esperar. Es una de las soluciones que han ofrecido a sus clientes desde la compañía del ratón animado. La otra, procedente del servicio técnico de la plataforma, ha sido la de recomendar pagar esos 89,99 euros y confiar en que la propia Disney les reembolse la diferencia en algún momento (salvo nueve céntimos que se queda a cambio sin dar explicación).
"Disney tiene la obligación de mantener la oferta en las mismas condiciones en que se publicó, sin que en la devolución del precio pagado por la renovación como si fuera una nueva suscripción, tenga derecho a retener cantidad alguna, por muy escasa que sea esta", asegura Almudena Velázquez, directora legal de reclamador.es, en declaraciones a este medio.
"Los errores en la plataforma son totalmente ajenos al consumidor y por lo tanto cualquier coste que implique el reembolso han de asumirse por la multinacional", añade. "Realmente sorprende que una empresa como Disney no haya previsto un simple sistema de segmentación entre el pago por renovación y el pago por nueva suscripción, y si lo ha hecho, no haya verificado antes su correcto funcionamiento", explica Velázquez.
La directora legal de la plataforma reconoce que es "lamentable que este error le beneficie, puesto que ningún usuario va a iniciar una reclamación por 9 céntimos de diferencia cuando el dinero les es reintegrado, aunque en su conjunto, puedan resultar miles de euros para la compañía".
"Precisamente este tipo de conductas han de ser sancionadas por el Ministerio de Consumo dado el impacto nacional que tiene, a fin de evitar que una negligencia se convierta en una ventaja para las empresas", concluye Velázquez.
¿ESPERAR FUNCIONA?
Después de varias horas de caos y confusión, algunos usuarios de Disney+ han empezado a ver como sus pagos de 69,99 euros anuales, que antes eran denegados, ahora eran finalmente aceptados.
Falta por ver si finalmente se resuelve un error, que llega en un momento especialmente crítico para los clientes de estas plataformas, que cada vez pretenden controlar más su uso.
