- DIA es el valor que más pierde del índice al dejarse cerca de un 3%
- El Santander y el BBVA han abierto con descensos cercanos al 1% que han moderado después
El Ibex 35 arranca la semana con caídas tras marcar el viernes máximos desde diciembre de 2015. El índice cotiza con descenso del 0,4% al filo de los 9.800 puntos con DIA como el valor que más pierde, al dejarse un 1%, y con pérdidas generalizadas en la banca. Fuera de España el gran protagonista es Deutsche Bank, que este fin de semana confirmó su intención de realizar una ampliación de capital de 8.000 millones de euros.
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Los inversores estarán pendientes de Deutsche Bank, que emitirá 687,5 millones de acciones. El banco se hunde un 6% en bolsa. La entidad, que tiene un valor en bolsa actualmente de 25.000 millones de euros, lleva meses en el foco por las dudas sobre su solvencia, ante la caída de rentabilidad del negocio y los litigios millonarios a los que se ha enfrentado.
La capacidad de arrastre del banco alemán al resto del sector financiero europeo amenaza así al Ibex 35, donde el peso de la banca está cerca del 40%. El Santander y el BBVA han abierto con pérdidas cercanas al 1% que han moderado posteriormente.
Técnicamente, el Ibex mantiene “intacta” la tendencia alcista del corto plazo, con la mirada en los 10.000 puntos, explica José María Rodríguez, analista técnico de 'Bolsamanía'. Más allá de los bancos, Telefónica fue otra de las palancas del índice con una revalorización del 13% en el acumulado del año. La 'teleco' cotiza hoy con alzas del 0,4%.
En el terreno macro la jornada cuenta con escasas referencias, como son el indicador de confianza del inversor Sentix, y los datos de pedidos de bienes duraderos en Estados Unidos. En Wall Street, donde el Dow Jones volvió a cerrar por encima de los 21.000 puntos, se da ya por hecho que la Reserva Federal (Fed) subirá los tipos en marzo, especialmente después de las declaraciones de su presidenta, Janet Yellen, y de otros miembros destacados del banco central. Esta semana, no obstante, será otra autoridad monetaria la protagonista, con la reunión del Banco Central Europeo (BCE) del jueves para la que el mercado no espera cambios.