Durante los últimos meses, el sector farmacéutico ha sufrido grandes cambios en su modelo de negocio, especialmente tras la pandemia. En concreto, la evolución de los procesos vinculados a la cadena de suministro y la atención a clientes, así como la implementación de nuevas tecnologías para la optimización de procesos internos son algunos de los avances, cuyo objetivo es mantener los estándares de calidad y asegurar el suministro a un mercado en constante evolución.
"La industria farmacéutica necesita una cadena de suministro ágil donde todos los sistemas estén conectados; que los datos se obtengan en tiempo real; que cada proceso sea trazable de principio a fin; y que puedan asegurar la calidad de todos los actores implicados", dice Luis Fernández-Sanguino, socio-director en Stratesys.
Teniendo esta premisa en cuenta, Stratesys, hub nativo digital, ha realizado un estudio acerca de cuáles son las cuatro estrategias de inversión en este sector, con el objetivo de dar cobertura a las nuevas necesidades del mercado:
Cadena de suministro digital. Las empresas necesitan tener una visibilidad completa de los procesos, una recopilación de datos centralizada y herramientas que interpreten los datos y permitan realizar previsiones precisas. Para conseguirlo, las empresas del sector están implantando sistemas software específicos para el sector que recopilan, analizan y transforman los datos.
Reducción de la falsificación. Durante los últimos meses, se ha detectado una tendencia al alza de los productos farmacéuticos ilegales. En esta línea, para garantizar la seguridad de los productos, las empresas del sector utilizan una combinación de etiquetas serializadas y soluciones de seguimiento y localización de sus productos.
Inventario ZERO. El modelo operativo tradicional de las empresas farmacéuticas se caracteriza por largos plazos de entrega y ciclos de producción lentos. Sin embargo, el avance de los medicamentos genéricos y la expiración de las patentes están reduciendo los márgenes comerciales. Esto está provocando que, las compañías opten por mantener un estricto control de las existencias, priorizando la planificación de la producción.
Customer Centric. Los cambios en los patrones de las enfermedades, y la atención sanitaria, así como el auge del comercio electrónico están ampliando gradualmente el foco de atención de las empresas farmacéuticas desde los clientes tradicionales (hospitales, farmacias, gobiernos, etc.) hacia el cliente final, el paciente. El principal motivo de este cambio es la expansión de la compra online, el cual ha provocado la proliferación de las farmacias electrónicas, muy populares entre los clientes finales.