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Cimic se ha adjudicado un contrato en Australia para operar durante los próximos tres años en una infraestructura ferroviaria situada en Nueva Gales del Sur, Estado donde se encuentra Sídney, por valor de 1.500 millones de dólares australianos, más de 950 millones de euros.
El contrato especifica la construcción de un centro de control para la región, la implementación de un nuevo sistema de señalización o la gestión del suelo, así como el control de la seguridad, acceso, del entorno y del desempeño de la red. La filial australiana de ACS ha obtenido este contrato del gestor del transporte de Nueva Gales del Sur (NSW, en sus siglas en inglés) a través de su subsidiaria UGL, y con el fin de comenzar las operaciones en enero de 2022.
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El consejero delegado y presidente de la firma, Juan Santamaría, ha asegurado que "Cimic y UGL se enorgullecen de apoyar a Transport for NSW para mantener en funcionamiento este servicio esencial en más de 2.300 kilómetros de ferrocarril y nos complace hacerlo con un fuerte compromiso con el empleo indígena y regional".
Cimic ha presentado esta semana sus resultados. Registró un beneficio neto de 620,1 millones de dólares australianos (396 millones de euros) en 2020, frente a las pérdidas de 630 millones de euros registradas un año antes, gracias a los 850 millones de euros ingresados en concepto de plusvalías por la venta del 50% de la minera Thiess.
Sin embargo, la pandemia de coronavirus afectó sensiblemente al negocio en el último ejercicio, registrando un beneficio comparable de 371,5 millones de dólares, frente a los casi 600 millones que conseguía anualmente en los últimos tres años.
