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La carrera por conseguir la cura del coronavirus no cesa. La última en ofrecer novedades ha sido la farmacéutica china Sinovac. Su presidente, Yin Weidong, ha asegurado este jueves que su vacuna (CoronaVac) es ya una de las más avanzadas del mundo y podrá comenzar a aplicarse masivamente a la población a principios del próximo año.
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Yin ha explicado que han probado con siete métodos diferentes de vacuna desde que comenzó la pandemia, pero encontraron que "la vía de la vacuna inactivada era la mejor". De hecho, tras realizar las pruebas de la fase 3 han constatado que no muestra "especiales reacciones adversas". Ahora están preparando la maquinaria para empezar a producir 300 millones de dosis anuales en una de sus fábricas construidas específicamente por el Covid.
Durante su comparecencia ante los medios en una visita a esta fábrica, ha indicado también que se está estudiando la posibilidad de que su vacuna se pueda fabricar en otros países. CoronaVac se está ahora probando en Brasil, Turquía, Bangladesh e Indonesia. "Es mejor hacer los test en el exterior porque en China la pandemia está prácticamente controlada y sería difícil probar su efectividad aquí", ha agregado el presidente de Sinovac.
Esta vacuna, que en Latinoamérica se produce en cooperación con el instituto brasileño Butantan, con sede en Sao Paulo, se encuentra en la última fase de ensayos en adultos a gran escala en países como Brasil, Indonesia o Turquía. De momento, el país sudamericano tiene aseguradas 46 millones de dosis hasta diciembre y otros 16 millones para el primer trimestre de 2012, según las autoridades brasileñas.
Cuatro vacunas chinas se encuentran actualmente en la fase 3 de ensayos clínicos: la de Sinovac, Sinopharm, el Instituto de Productos Biológicos de Wuhan y la de Cansino Biologics. Esta últim comenzó a usarse a finales de junio en el Ejército del país asiático.
