Caos total en OpenAI, la empresa desarrolladora de ChatGPT. Ante la presión ejercida por los empleados de la firma y sus principales inversores, la junta directiva y Sam Altman han abierto las negociaciones para un posible regreso del que fue CEO de la compañía hasta la noche del viernes.
Según una información de 'Bloomberg' elaborada con fuentes cercanas a la firma, las conversaciones se están produciendo entre Altman y al menos un miembro de la junta, Adam D'Angelo. El escenario que discuten es un regreso de Altman como director en una junta de transición.
Esto se produce después de que 747 empleados de la empresa (el 95% de la plantilla) hayan exigido por escrito el regreso de Sam Altman como consejero delegado. Además, los grandes inversores, como Thrive Capital, Khosla Ventures y Tiger Global Management, están intentando que el directivo vuelva a ocupar su puesto de liderazgo y reemplazar al actual Consejo de Administración.
Por su parte, el CEO de Microsoft, Satya Nadella, que contrató inmediatamente a Sam Altman tras su despido de OpenAI para ponerle al frente de un nuevo equipo de investigación avanzada de inteligencia artificial, ha dicho que no se opondría a su vuelta, aunque también ha añadido que es necesario reformar la estructura de gobernanza de la empresa.
"Creo que está muy claro que algo tiene que cambiar en torno a la gobernanza", comentó en declaraciones a 'CNBC'. Hay que recordar que Microsoft firmó un acuerdo con OpenAI para invertir 10.000 millones de dólares y que es el máximo accionista de la empresa, con un 49% del capital.
El resto de grandes inversores se está planteando, según informan varios medios, demandar al actual Consejo de OpenAI y exigir su dimisión. Por el momento, el Consejo se mantiene firme en su decisión de expular a Altman, lo que provocó también la dimisión del co-fundador Greg Brockman, que también ha sido fichado por Microsoft.
Además, Ilya Sutskever, el último co-fundador de la compañía que se mantiene en el Consejo, ha pedido perdón públicamente por apoyar el despido de Altman y ha firmado la carta de los empleados en la que se pide su regreso.
DECLARACIONES DE ALTMAN
Por su parte, según publica 'Bloomberg', Sam Altman también vería con buenos ojos su vuelta a OpenAI. El directivo ha señalado en X que "mi principal prioridad y la de Satya sigue siendo garantizar que OpenIA siga prosperando. Estamos comprometidos a brindar total continuidad de operaciones a nuestros socios y clientes".
Además, ha indicado que "tenemos más unidad, compromiso y enfoque que nunca. Todos vamos a trabajar juntos de una forma u otra y estoy muy emocionado. Un equipo, una misión".
MICROSOFT CIERRA EN MÁXIMOS
Sobre el impacto en el mercado de esta saga empresarial, Microsoft cerró este lunes con subidas del 2% y marcó nuevos máximos históricos, ya que los inversores consideraron positivo su rápido movimiento para retener a Altman.
"Microsoft confía en que Altman pueda aportar algo de brillo a su iniciativa interna de IA y también espera que el nuevo consejero delegado de OpenAI, Emmett Shear, pueda estabilizar la empresa pionera en IA y el valor de su inversión", comentó Ben Laidler, estratega de mercados globales de eToro.
Buena prueba de que la crisis en OpenAI es seguida muy de cerca por el resto de competidores que desarrolla sistemas de inteligencia artificial es el ofrecimiento del consejero delegado de Salesforce.
"Salesforce igualará (el sueldo) a cualquier investigador de OpenAI que haya presentado su renuncia y se una inmediatamente a nuestro equipo de investigación de inteligencia artificial de Salesforce Einstein bajo la dirección de Silvio Savarese. Envíame tu CV directamente a [email protected]", ha publicado Marc Benioff en la red social X.