Ana Botín ensalza su gestión frente a la de su padre: dispara beneficio y asciende a mujeres

El último ejercicio completo en el que Emilio Botín comandó Santander, el beneficio del grupo se situaba en unos 5.800 millones de euros, muy por debajo del registrado este año, según defendió Botín en la presentación de resultados del martes.

Pero con un matiz. La presidenta de Santander defendió que sus ganancias son ahora de casi el doble sin tener en cuenta el efecto de Reino Unido, que en 2019 perjudicó los resultados de la entidad (8.200 millones), aunque teniéndolo en cuenta se quedó en 6.515 millones de euros. Al cierre de 2018, las ganancias fueron de 7.810 millones. “Hemos doblado el beneficio en cinco años, pero lo hemos hecho aumentando el número de clientes y hemos más que doblado el dividendo por acción”, afirmó Botín.

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La banquera defendió además que la rentabilidad del banco sería cercana al 17% si Santander tuviera las exigencias de capital de hace cinco años con las condiciones actuales del sector, que obligan a Santander a tener 22.000 millones de euros más de capital.

“Con la rentabilidad y el modelo de negocio que tenemos hoy y el capital de 2014, estaríamos en un 17% del retorno del capital tangible (ROTE)”, explicó, razón por la cual en el momento en el que los bancos dejen de tener los fuertes requerimientos de capital que se les imponen ahora la rentabilidad dará un paso adelante, según Botín.

EQUIPO RENOVADO Y MÁS IGUALITARIO

Han pasado ya más de cinco años desde que Botín sucediera a su padre, el histórico banquero Emilio Botín, al frente de la primera entidad del país tras su repentino fallecimiento. Y los números de negocio no son los únicos que han mejorado en los últimos cinco años, según Botín. También lo han hecho las proporciones de hombres y mujeres en la plantilla del banco y, en especial, en los puestos directivos.

A su llegada a la presidencia de Santander, la banquera comenzó un proceso de renovación del equipo más cercano a la presidencia, que culminará con la salida de Rodrigo Echenique de la presidencia de Santander España en las próximas semanas.

El equipo del que se rodeaba Emilio Botín era menos igualitario, según remarcó la banquera el martes. “Cuando yo llegué a Banesto en 2003 no había ni una sola mujer directora regional ni en Banesto ni en Santander”, puso como ejemplo. Ahora las cosas son distintas: son cinco de doce.

También el consejo de administración de Santander ha avanzado en términos de igualdad en los últimos cinco años, aunque menos. En el momento de la incorporación de Botín a la presidencia, este órgano lo conformaban quince personas, de las que solo cuatro eran mujeres. Sumaron una tras la renovación impuesta por la banquera dos meses después.

Ahora el consejo está formado por seis mujeres y nueve hombres. Aunque el avance parece poco significativo, implica superar la recomendación que la Comisión Nacional del Mercado de Valores hizo a las cotizadas para este año (30% de mujeres). Pocas empresas del Ibex 35 lo consiguen.

El momento de nombrar un sustituto para Echenique en Santander España se mostraba propicio para poner en el puesto a una mujer, pero finalmente el elegido fue Luis Isasi, exdirectivo de Morgan Stanley. Preguntada por esta cuestión en la presentación de resultados, Botín respondió que fomentar le encantaría que el próximo CEO de Santander España fuera una mujer y que, aunque el banco está comprometido con fomentar la igualdad, no quiere “discriminar a los hombres”. “Nosotras no somos así”, zanjó.