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Boeing ha obtenido este lunes un pedido provisional de 25 aviones 737 Max 10, junto con opciones para comprar 25 aviones más, por parte de Qatar Airways. A la firma del acuerdo, que ha tenido lugar en la Casa Blanca, han asistido el consejero delegado de Boeing, Dave Calhoun; la secretaria de Comercio de EEUU, Gina Raimondo, y el embajador de Qatar en EEUU, el jeque Meshal bin Hamad Al Thani.
El pedido tiene un valor de 34.000 millones de dólares a precios de catálogo, según el fabricante de aviones, aunque las aerolíneas suelen recibir descuentos, especialmente para pedidos tan grandes. Tras conocerse la noticia, las acciones de Boeing se disparan cerca de un 4% en Wall Street.
El transportista se ha convertido en el primer cliente de Boeing para la versión de carga de su nuevo avión de pasajeros, el 777X, con motivo del lanzamiento oficial del nuevo avión de carga, anunciado el pasado mes de noviembre.
Qatar firmó un pedido de 34 de los 777X, un gigantesco avión bimotor propulsado por General Electric, así como opciones para 16 aviones más. Boeing espera que el modelo comercial del 777X entre en circulación a finales de 2023, con unos tres años de retraso.
Boeing está haciendo una gran apuesta por la carga aérea, aprovechando la ola de restricciones a los viajes y los casos de Covid, que han reducido los viajes internacionales. Unido a esto, una serie de atascos portuarios ha provocado que la demanda y los precios de la carga aérea aumentasen en 2021.
Boeing declaró la semana pasada que el tráfico de carga aumentó un 7% el año pasado respecto a los niveles anteriores a la pandemia, lo que impulsó una demanda récord de sus aviones de carga.
La versión de carga del 777X, cuyos vuelos de prueba se iniciaron hace dos años, es también una apuesta por que los transportistas de carga busquen nuevos modelos que reduzcan su consumo de combustible y sus emisiones. Boeing afirma que los nuevos aviones de carga podrán volar casi con la misma carga útil que un 747-400 de carga, pero con un 25% menos de emisiones.
El acuerdo Max con Qatar se produce menos de dos semanas después de que Airbus dijera que había terminado su contrato con Qatar Airways para 50 aviones A321neo, un rival de los Max.