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BNP Paribas obtuvo un beneficio neto atribuido de 4.290 millones de euros en los seis primeros meses del año, lo que representa un retroceso del 1,9% respecto al resultado del mismo periodo de 2016 por el impacto de elementos extraordinarios, según informó la entidad francesa. Sus acciones caen un 0,64%.
De hecho, sin tener en cuenta el efecto de elementos atípicos, el beneficio de BNP Paribas en el primer semestre del año fue de 4.384 millones de euros, un 15,5% más que un año antes.
La cifra de negocio del banco galo entre enero y junio alcanzó los 22.235 millones de euros, un 0,3% más que un año antes, mientras que el riesgo de crédito disminuyó un 19% en el semestre, hasta 1.254 millones.
En el segundo trimestre, el beneficio neto atribuido de BNP Paribas retrocedió un 6,4% interanual, hasta 2.396 millones de euros, aunque sin tener en cuenta el impacto de elementos extraordinarios habría subido un 17,2%, hasta 2.566 millones de euros, mientras su cifra de negocio bajó un 3,4%, hasta 10.938 millones.
La ratio de capital básico CET1 de BNP Paribas al cierre del primer semestre se situó en el 11,7%, una décima por encima del nivel registrado a 31 de marzo.