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BMW ha anunciado que espera lograr su objetivo del 50% en ventas de vehículos eléctricos "mucho antes" de 2030. Además, la compañía automovilística también pretende "estabilizar" sus precios, que en años anteriores se encontraban en ascenso, gracias a la "ligera" subida de ventas de coches con respecto a 2022, según ha anunciado en un comunicado.
El fabricante ha indicado este miércoles que espera un EBIT de alrededor del 10%. Además, también ha reafirmado los datos proporcionados hace una semana en los que anunciaban un EBIT de su sector de automoción de 10.600 millones de euros y un margen de beneficios del 8,6%. A pesar de estos datos, la compañía cree que habrá un descenso en nuevas matriculaciones en Europa.
En cuanto a la electrificación de sus modelos, BMW cree que la venta de vehículos eléctricos supondrá un 15% del total en este 2023. Tras esto, la empresa pretende conseguir que un cuarto de sus ventas sean de coches eléctricos en 2025, y aumentar esto a un tercio en 2026, recoge 'Reuters'.
Por otra parte, Oliver Zipse, consejero delegado de la compañía, ha afirmado que BMW también quiere apostar por los vehículos impulsados por hidrógeno, por lo que ven "los vehículos de hidrógeno como un complemento significativo a la e-movilidad, incluso con un cierto desfase temporal".
A su vez, el director financiero de BMW, Nicolas Peter, que se jubilará a finales de este año, ha indicado que espera que el suministro de energía y de chips se estabilize en los próximos meses, pero también sigue pronosticando importantes cargas de costes derivadas de los cuellos de botella logísticos y de los elevados precios de las materias primas.
Con todo, el fabricante germano ha señalado que planea mantener los precios estables, después de años de hacer frente al aumento de los costes repercutiéndolos a los clientes.