La lira turca estira su recorrido bajista por quinto día consecutivo este miércoles, con un mínimo histórico tras otro, ahondando en una depreciación que la ha llevado a ceder un 28% en lo que va de año. La moneda se cambia de manos en 8,30 por dólar, después de rebasar el cambio de 8 liras este lunes. Frente al euro, apunta a las 10 liras, mientras BBVA sigue muy pendiente de la evolución de la divisa. "La lira turca está siendo destruida", avisan los expertos que ubican su cambio en 9 por dólar en un futuro próximo.
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Los títulos de la entidad vasca se dejan un 2% en una jornada de caídas generalizadas en las bolsas europeas y en apenas 24 horas presenta sus resultados del julio a setienbre, que mostrarán cómo se ha recuperado un 21% frente al segundo trimestre de 2020, según en consenso de analistas.
Con todo, con unas cuentas que reflejarán una caída del 37% comparado con hace un año y las malas noticias que llegan por parte de la divisa otomana no auguran una mejoría para el banco que preside Carlos Torres. La moneda va camino de cerrar en octubre su peor mes de este año, pese a los intentos del país por sujetar su moneda y en medio de las tensiones polítcias entre Ankara y París.
Sin embargo, la decepción de que el banco central no aprobara otro incremento de la tasa de interés el jueves pasado ha provocado que la lira registre mínimos todos los días de esta semana. El aumento de las infecciones de Covid-19, la incertidumbre sobre las elecciones y el estímulo en EEUU no han hecho más que aumentar el telón de fondo negativo.
El banco central sí amplió la horquilla de la tasa de interés para darse más flexibilidad en el aumento del costo promedio ponderado de la financiación. Los prestamistas estatales también han vendido más de 1.000 millones de dólares para apoyar la moneda en lo que va de semana, según escribe 'Bloomberg'. El Gobierno de Ankara descarta, por ahora, mayores medidas como un corralito.