Atrás quedan los temores. Han pasado ya más de veinte días desde que el izquierdista Andrés Manuel López Obrador se convirtiera en presidente de México y las aguas parecen estar más calmadas. También para las empresas y, concretamente, para BBVA, Santander y Sabadell, que no solamente han registrado cifras muy positivas este semestre en el país mexicano, sino que esperan de él grandes crecimientos a futuro.
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México representa el primer mercado de BBVA. Durante el primer semestre, su negocio allí ha aportado al banco el 37,3% de su beneficio, el 34,2% de su margen neto y el 28,2% de su margen bruto. La entidad vio crecer sus ganancias un 21,2% en México, hasta los 1.208 millones de euros, un avance superior al del consolidado, que creció un 15%.
El consejero delegado de BBVA, Carlos Torres, explicó el viernes durante la presentación de resultados semestrales que el banco tiene en el país “un panorama bastante positivo por delante”, después de haberse “quitado la incertidumbre de las elecciones”.
El nuevo presidente, para Torres, ha lanzado “un mensaje muy inclusivo” de “respeto a la disciplina fiscal, a la promoción del comercio internacional y a la defensa del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (NAFTA), así como “al orden establecido”.
“Así lo han reflejado los mercados, los tipos de cambio y las previsiones de todo el mundo”, valoró. De hecho, las perspectivas para la economía mexicana son “positivas” para BBVA: “Esperamos un crecimiento este año del 2,6% y un crecimiento continuado del 2% el año que viene”.
Casi al cierre del pasado semestre, el banco central del país decidió incrementar en 25 puntos básicos el objetivo para la Tasa de Interés Interbancaria a un día a un nivel del 7,75%, en línea con las previsiones del consenso.
SANTANDER ESPERA GRANDES CRECIMIENTOS
También es optimista respecto al país Santander. La región es el quinto mercado de la entidad, cuyas ganancias allí pesan un 7% sobre el beneficio total del grupo. Santander creció allí un 13% entre enero y junio, hasta registrar unas ganancias de 359 millones de euros, con ingresos de 1.699 millones (+7%). En su caso, el beneficio en México también pisó el acelerador frente al resto del negocio.
En México, además de en Brasil, la entidad espera “grandes crecimientos”, como explicó el jueves su consejero delegado, José Antonio Álvarez, durante la presentación de resultados semestrales. Asimismo, señaló que estos dos países “lo están haciendo razonablemente en línea” con los objetivos marcados en su plan estratégico.
SABADELL: “HAY QUE SER OPTIMISTAS”
Asimismo, Sabadell anticipa noticias positivas en la región. Su consejero delegado, Jaime Guardiola, que se confiesa “muy fan de México”, cree que “hay que ser muy optimistas” con el país. “Ojalá la Administración de López Obrador sea buena”, añadió durante la presentación de los resultados semestrales del banco, donde explicó que “sus primeros movimientos han sido con altos niveles de ortodoxia, lo lógico cuando tienen un país que crece y tiene oportunidad de seguir creciendo”.
Guardiola, que conoció a López Obrador durante su etapa como vicepresidente de BBVA Bancomer, puso en valor esta semana que durante el mandato del nuevo presidente azteca como alcalde de Ciudad de México “fueron años buenos para la ciudad”. También destacó la “energía vital enorme” del país, donde “funciona el ascensor social”. Allí, destacó, los nuevos votantes en los pasados comicios alcanzaron los 15 millones, frente a los 6.000 que hubo en las últimas elecciones catalanas.
Aunque la entidad no desglosa sus datos concretos de México, su beneficio en ‘Otras geografías’, partida compuesta, básicamente, por el negocio en el país latinoamericano, se situó en 31,8 millones de euros. Estas ganancias están en línea con las del ejercicio anterior si no se tiene en cuenta la no aportación de la filial estadounidense del banco Sabadell United Bank, de la que se desprendió en la segunda mitad de 2017.