BBVA alarga la incertidumbre sobre el futuro de González por el caso Villarejo

El máximo órgano de gestión de la entidad que González presidió durante 18 años, hasta el pasado mes de diciembre, se ha reunido esta semana para dar su visto bueno a las cuentas anuales de 2018 en un consejo que estaba programado como ordinario. Sin embargo, los consejeros no han tomado una decisión sobre el cargo honorífico que González mantiene en el banco.

El expresidente de BBVA ya no dispone de funciones ejecutivas en la entidad, es decir, no tiene poder de decisión sobre el banco, pero sí mucha influencia. Además, continúa vinculado a la entidad al ocupar un cargo de nueva creación, la presidencia de honor, y está a los mandos de la Fundación BBVA.

La entidad mantiene abierta una investigación interna desde el pasado mes de junio, cuando se empezaron a conocer las informaciones relacionadas con el presunto espionaje. No obstante, una vez que se han conocido más detalles este mes, BBVA decidido que las pesquisas estén en manos de terceros. PwC se encarga de ejecutar una auditoría forensic, mientras que Garrigues y Uría analizan el tema legal. Los tiempos para conocer las posibles responsabilidades, por tanto, están en manos de terceros.

QUE SE RESUELVA LO ANTES POSIBLE

Este tipo de investigaciones no se resuelven en unos días, sino que pueden durar meses, lo que no hace más que aumentar la presión sobre BBVA. Con todo, las autoridades ya han trasladado públicamente su deseo de que la investigación se resuelva lo antes posible.

El toque más sonado ha venido por parte del Banco Central Europeo (BCE). El actual vicepresidente, Luis de Guindos, que en el pasado ha vivido algunos enfrentamientos con Francisco González, se limitó a señalar que desde el supervisor esperan "lo antes posible" una explicación, aunque añadió que "en estas cosas, el tiempo es clave".

El Banco de España, en voz de su gobernador, Pablo Hernández de Cos, también pidió celeridad a la entidad. "Es muy importante que la investigación se realice con total profundidad y con la mayor prontitud posible para tratar de eliminar y minimizar el riesgo reputacional potencial que podría suponer para la propia entidad", señaló en el Congreso.

Asimismo, la ministra de Economía y Empresa, Nadia Calviño, que reconoció que el Gobierno y el BCE hablan de este tema y que el asunto afecta a la reputación de BBVA, espera que las responsabilidades penales se diriman en los tribunales.

También algunos ejecutivos de las principales entidades bancarias se han referido al tema. María Dolores Dancausa, consejera delegada de Bankinter, defendió que González aún no está condenado y que, en todo caso, ha sido un "banquero modélico". Ana Botín, presidenta de Santander, se limitó a valorar que BBVA es "un gran banco".

El BCE y el Banco de España quieren que el caso se resuelva lo antes posible

Por su parte, José Ignacio Goirigolzarri, presidente de Bankia y número dos de González en BBVA durante ocho años, afirmó estar "sorprendido" por las informaciones publicadas en relación con el caso Villarejo y se descartó como responsable. "Ni conocimos ni participamos en nada", comentó en su nombre y en el de José Sevilla, su actual número dos y exdirectivo de BBVA.

La duda de si González dimitirá o será destituido por Carlos Torres, el hombre al que el expresidente de BBVA dejó su lugar en el banco, se mantiene por el momento. También la incertidumbre sobre el banco decidirá iniciar acciones legales contra González, con la acusación por la administración desleal como principal baza. El actual primer ejecutivo del banco solamente se ha pronunciado una vez al respecto: hace unas semanas prometió a sus trabajadores actuar "con la contundencia necesaria" para esclarecer los hechos. El tiempo lo dirá.