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Bayer ha presentado este miércoles su plan estratégico 2019-2022, y en él la químico-farmacéutica alemana promete a sus accionistas aumentar el dividendo y seguir reduciendo la deuda financiera. Lo hará usando el flujo de caja libre, que prevé que aumente hasta los 23.000 millones de euros para 2022, y al efectivo que logre gracias a las desinversiones previstas en los próximos años.
En un comunicado remitido al regulador bursátil, Bayer explica que también destinará una parte "significativa" de los ingresos que logre por la venta de activos a la recompra de acciones. La compañía espera que el nivel de deuda se mantenga estable en torno a los 36.000 millones de euros en 2019, y que posteriormente vaya reduciéndose hasya situarse entre 26.000 y 28.000 millones para 2022. Además, ha explicado el director financiero de la alemana, Wolfgang Nickl, "los recursos ayudarán a fortalecer nuestras capacidades de innovación y a financiar adquisiciones".
En su plan, la compañía alemana se fija también un "ambicioso objetivo de crecimiento". "Se espera que todas las divisiones de Bayer contribuyan a mejorar el rendimiento del grupo hasta 2022", ha dicho por su parte Werner Baumann, presidente del consejo de administración. En concreto, espera que las ventas crezcan un 4% en 2019 y entre un 4% y un 5% en los siguientes años, sobre la base de tipos de cambio constante. Eso supondrá un incremento de las ventas desde los 44.600 millones de euros de 2018 hasta los 46.000 millones en 2019 y los 52.000 millones en 2022.
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Asimismo, Bayer prevé incrementar el ebitda a un ritmo del 9% anual, pasando de los 11.500 millones de euros en 2018 a unos 12.200 millones en 2019 y 16.000 millones para el fin del periodo previsto en su plan estratégico.
Bayer también se ha fijado como objetivo aumentar los ingresos de las actividades básicas de la empresa que se traducirán en una mejora del beneficio por acción (BPA) de alrededor del 10%. De hecho, se espera que el BPA sea de 1.000 millones de euros este año, al pasar de 5,70 a 5,90 euros, y la compañía espera ir aumentándolo hasta los 6,80 euros en 2019 y los 10 euros en 2022.
La innovación es uno de los objetivos fundamentales de la compañía germana, que ha anunciado que invertirá un total de 35.000 millones de euros en sí misma hasta finales de 2022, con una inversión en I+D que ascenderá a 2.000 millones de euros. "A través de nuestra posición de liderazgo en salud y nutrición estamos creando un valor sustancial para nuestros accionistas y la sociedad", ha señalado Baumann.