En Bankinter creen que los actuales niveles de cotización ASML presentan "un potencial de revalorización a futuro suficientemente atractivo", con lo que reiteran su recomendación de 'compra'. Pese a que rebajan su precio objetivo a 793 euros frente a los 970 euros previos, aún cuenta con un potencial del 25%.
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Aunque no descartan que el valor pueda seguir presentando volatilidad a corto plazo, consideran que tras las fuertes caídas acumuladas, "la acción ya ha descontado sobradamente el impacto negativo de la revisión a la baja de las cifras y supone una oportunidad de compra".
Los expertos llevan a cabo una revisión a la baja de sus previsiones para los próximos ejercicios, después de que la propia compañía también revisara a la baja las previsiones de cara a 2025 alegando retrasos en la demanda de clientes.
En concreto, ASML espera ahora que las ventas netas se sitúen entre 30.000 millones de euros y 35.000 millones de euros, que es la mitad inferior del rango que había proporcionado en su 'Investor Day' de 2022. Y calculan un margen bruto de entre el 51% y el 53%, también por debajo del rango que proporcionaron entonces.
Además, destacan que Samsung ha anunciado que ha pospuesto los pedidos que tenía previstos a ASML por retrasos en su nueva fábrica de EEUU.
"A medida que se van conociendo detalles y cifras de los clientes parece claro que el problema de la cartera de ASML se circunscribe a uno o dos clientes (Samsung y posiblemente Intel) como principales causantes de la caída", comentan.
En su opinión, el problema de la cartera de pedidos, por tanto, parece que se circunscribe a un número limitado de clientes, "lo que consideramos positivo, dado que confirmaría que no hay una caída de demanda estructural ni una desaceleración generalizada del mercado".