La presidenta del Govern, Francina Armengol, se ha reunido este lunes con el cónsul general del Reino Unido en Cataluña, Aragón, Andorra y Baleares, Lloyd Milen, para abordar proyectos que permitan alargar la temporada turística en las Islas hasta noviembre.
En rueda de prensa, el delegado británico ha valorado la iniciativa del Govern apuntando que las Islas son "un destino fantástico para estar en otoño".
Durante la reunión se han abordado también cuestiones relativas como la situación sanitaria y turística de Baleares o la futura previsión del semáforo con Reino Unido, aspectos que se volverán a valorar dentro de tres semanas tras el análisis de los datos epidemiológicos y de las cifras de vacunación en ambos territorios.
Por el momento, ha asegurado Milen, "la situación es favorable" y espera que "siga así para que los británicos puedan seguir viniendo a pasar sus vacaciones".
El cónsul ha insistido en que las "altas cifras" de vacunación son "el secreto para bajar las restricciones" y las que han ayudado a abrir en Reino Unido.
De hecho, ha recordado que son datos que se analizarán en cada isla individualmente. De este modo, se puede ver "cómo se encuentra la situación del semáforo para el turismo británico" de forma separada en Baleares.
Al encuentro han acudido también la consellera de Presidencia, Función Pública e Igualdad, Mercedes Garrido, y la ministra consejera de la Embajada del Reino Unido en España, Sarah Cowley.
TURISMO DE EXCESOS EN BALEARES
A la hora de contestar a los medios de comunicación, Milen ha comentado que respecto el turismo de excesos, protagonizado por jóvenes británicos en las Islas, considera estas "imágenes muy tristes", aunque ha declarado que este verano hay menos incidentes que otros años.
También ha explicado que, junto con el Govern, Reino Unido se encuentra trabajando en una campaña de concienciación "para que la población joven entienda las medidas y restricciones" impuestas en Baleares y "ayudar a disminuir este tipo de turismo".
En este sentido, ha alabado el "esfuerzo del Govern por controlar la situación" y ha insistido en el apoyo británico a todas las medidas de Baleares que ayuden a contener este tipo de demanda, ejemplificando el control en la venta de alcohol o el horario de los bares, que son "muy bienvenidos".