El fabricante neerlandés ASML da una de cal y otra de arena con los resultados del tercer trimestre. La compañía europea ha señalado que el beneficio en los últimos tres meses ha alcanzado los 1.893 millones de euros. Esta cifra no solo supone un aumento de más del 10% respecto a la cifra del año anterior, sino que también ha superado las previsiones del consenso, que situaban el beneficio a cierre de septiembre en 1.810 millones. En los nueve primeros meses, el beneficio de la compañía ha repuntado hasta los 5.790 millones de dólares (+52%).
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Las acciones de semiconductores europeos ya valoran un ciclo descendente, según CitiSin embargo, el valor cae con ganas en bolsa debido a que su cartera de pedidos se ha reducido drásticamente. Según ha informado ASML, informó que los pedidos recibidos entre enero y septiembre los 10.854 millones, una cifra un 55,4% inferior a la del mismo periodo de 2022. En el tercer trimestre, el dato es todavía peor: el recorte alcanza el 70,8% de enero a septiembre, situándose en 2.602 millones, cifra que también está un 42,2% por debajo de la cifra del segundo trimestre.
"El sector de los semiconductores atraviesa actualmente la parte baja del ciclo y nuestros clientes esperan que el punto de inflexión sea visible a finales de este año. Los clientes siguen teniendo dudas sobre la forma de la recuperación de la demanda en el sector. Por tanto, esperamos que 2024 sea un año de transición. Basándonos en nuestra perspectiva actual, adoptamos un punto de vista más conservador y esperamos una cifra de ingresos similar a la de 2023. Pero también vemos 2024 como un año importante para preparar el importante crecimiento que esperamos para 2025", ha apuntado Peter Wennink, presidente y consejero delegado de la firma neerlandesa.
Aunque ASML mantiene una considerable cartera de pedidos, la industria de semiconductores ha experimentado una ralentización después de que la inflación y los temores a una recesión golpearan el gasto de los consumidores. De hecho, las ventas de Taiwan Semiconductor Manufacturing Company (TSMC), el mayor cliente de ASML, cayeron un 11% en el tercer trimestre, según cálculos de 'Bloomberg'.
En cuanto a los ingresos, las ventas de ASML se situaron en línea con las expectativas del consenso, alcanzando los 6.670 millones de euros (+15,5%). Hasta septiembre, los ingresos alcanzaron los 20.321,5 millones de euros, un 37,8% más que un año antes, incluyendo un aumento del 52,2% en las ventas de nuevos sistemas, hasta 16.256 millones, mientras que la provisión de servicios reportó ingresos de 4.065 millones, un 0,1% más.
Wennink ha indicado que espera que los ingresos netos en el cuarto trimestre se sitúen entre los 6.700 y 7.100 millones de euros, con un margen bruto de entre el 50% y el 51%. De igual modo, ASML ha confirmado su "expectativa de fuerte crecimiento (+30%) para 2023" con un aumento de las ventas netas hacia el 30% y una "ligera mejora en el margen bruto" en relación con 2022.
La caída de la demanda en otros lugares convirtió a China en el mayor mercado de ASML el pasado trimestre, superando a Taiwán, y representa cerca de la mitad de sus ventas (46%). La compañía neerlandesa es el único fabricante de los equipos de litografía necesarios para fabricar los semiconductores más avanzados, ha experimentado un aumento del negocio en el gigante asiático debido a que los fabricantes de chips de este país han incrementado sus pedidos ante los controles a la exportación. "Nuestros clientes chinos dicen que están encantados de tomar las máquinas que otros no quieren. Porque sus fábricas están preparadas. Pueden llevarse las herramientas", indicó Wennink a principios de año.
En este sentido, cabe recordar que EEUU y sus aliados occidentales están tratando de frenar la exportación de chips y equipos de fabricación de estos a China. Este pasado verano, Washington y Ámsterdam impusieron restricciones a ASML para que enviara a Pekín algunas máquinas de litografía ultravioleta profunda por inversión, unos de sus equipos más avanzados. ASML ha mantenido que es poco probable que estas medidas, que entrarán plenamente en vigor en 2024, afecten a sus resultados financieros de 2023.
Este martes, el Departamento de Comercio de EEUU anunció nuevas restricciones para impedir la venta de chips de inteligencia artificial a China. Washington dijo que estas pretenden cerrar las lagunas que aparecieron tras las restricciones del año pasado. Según la responsable de la cartera de Comercio, Gina Raimondo, el objetivo del refuerzo de los controles sería dificultar el acceso de China a chips que podrían ser clave para sus avances en el campo de la inteligencia artificial (IA) y la computación. Las mejoras en estos sectores podrían ser aprovechadas para incrementar las capacidades tecnológicas del Ejército chino.
Para los expertos de Bankinter, el valor sigue siendo una clara 'compra' aunque la cartera de pedidos sea "muy floja". "Los resultados de ASML, así como las guías para el año 2023, no presentan sorpresas, si bien los mensajes conservadores y la débil cartera de pedidos podría afectar hoy a la cotización del valor. Creemos que ASML mantiene su atractivo a largo plazo basado en la solidez de su modelo de negocio, su posición de líder en su segmento y la solidez de su balance (caja neta de 4.975 millones de euros)", explica el banco naranja, que otorga un precio objetivo de 765 euros al valor. Esta valoración dibuja un potencial alcista de más del 30% para los títulos de la cotizada neerlandesa.