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Todos los ojos estaban puestos en una Apple plagada de dudas. Que el gigante tecnológico de Cupertino no atraviesa su mejor momento no es algo nuevo, pero los últimos meses parecen haber hecho mella en la imagen de una compañía que hace no tanto parecía inexpugnable. La caída de la demanda de sus productos en el mercado asiático, especialmente en China, así como otros titulares negativos han hecho mella en el valor. Por ello, la Conferencia Mundial de Desarrolladores (WWDC, por sus siglas en inglés) era de suma importancia para la firma dirigida por Tim Cook. Pero la tan esperada llegada de la inteligencia artificial (IA) a sus dispositivos y su alianza con OpenAI no han terminado de convencer y la firma ha bajado un 1,91% en bolsa.
Este evento anual, que ha comenzado este lunes 10 de junio y se extenderá hasta el viernes 14, ha servido para que la compañía dé a conocer las últimas versiones de algunos de sus sistemas operativos, entre los que se incluyen iOS 18, iPadOS 18, macOS 15, tvOS 18, watchOS11 y visionOS2.
En este sentido, y respecto al sistema operativo de Apple para su Vision Pro, utilizará la inteligencia artificial para transformar fotos normales en fotos espaciales y estrenará nuevos controles basados en gestos.
En cuanto a iOS 18 incorpora numerosas funciones de personalización para la pantalla de inicio, un nuevo aspecto del centro de control, actualizaciones de privacidad, filtros para la aplicación Correo o la posibilidad de enviar mensajes iMessage y SMS vía satélite.
La tecnológica ha dado a conocer, además, actualizaciones de AirPods y nuevas funciones de tvOS; watchOS 11 para Apple Watch; iPadOS 18, que incluye una serie de nuevas funciones para el iPad y macOS Sequoia. Asimismo, ha comunicado el lanzamiento de una aplicación Passwords para iPhone, iPad, Vision Pro, Mac y Windows que ayuda a almacenar todas las contraseñas.
Pero el foco estaba, para sorpresa de nadie, en la inteligencia artificial (IA). Y la compañía, por fin, ha presentado su tan esperada estrategia basada en esta tecnología, 'Apple Intelligence', una colección de "modelos de difusión" y lenguaje grande "altamente capaces", así como un "índice semántico en el dispositivo" que funciona en todas las aplicaciones, para identificar datos y enviarlos a los modelos.
El enfoque de la compañía es el de integrar la inteligencia artificial en tantas aplicaciones como sea posible, yendo más allá de la generación de imágenes o vídeo y apostando por funciones de uso más extendido y habitual. En este sentido, Apple Intelligence puede reconocer qué notificaciones son importantes para cada usuario; introducirá mejoras de estilo y corrección de pruebas en todo el sistema en aplicaciones nativas y de terceros; y creará fotos generativas basadas en la biblioteca de fotos, de forma similar a otras plataformas.
Apple Intelligence también aprovechará los modelos basados en la nube en servidores especiales que utilizan Apple Silicon para garantizar que los datos de los usuarios sean privados y seguros. Si una solicitud necesita ir a un servidor en la nube, Apple dice que solo enviará una selección limitada de datos de una manera "criptográficamente" segura.
Otra de las principales novedades ha sido la renovación de Siri, el asistente de voz de la compañía, basada en modelos lingüísticos de gran tamaño (LLM, por sus siglas en inglés), que ahora tiene la capacidad de responder "miles de preguntas" y podrá realizar acciones dentro y entre apps, como enviar un artículo de Apple News a un hilo grupal en Mensajes. Las aplicaciones de terceros también podrán aprovechar algunas de las mejoras de Siri.
Además, ha introducido una nueva forma de emojis personalizados llamada Genmoji. Ahora los usuarios pueden crear sus propios emojis utilizando la IA de Apple para cuando no puedan encontrar el emoticono adecuado para expresar lo que están tratando de decir. Se podrán crear directamente con el teclado.
Con todo, el punto más destacado y esperado no tenía tanto que ver con Apple como con Microsoft. Y es que la IA de Apple se basa en su propia tecnología, pero también en la de OpenAI, la compañía dirigida por Sam Altman y en la que Microsoft ha invertido cientos de millones de dólares. La asociación con Open AI permitirá a Siri aprovechar las capacidades de ChatGPT.
Así, por ejemplo, se puede crear un cuento para dormir para un niño y añadir imágenes creadas por ChatGPT. Será gratis, sin crear una cuenta, y su solicitud e información no serán registradas. La integración llegará a iOS 18, iPadOS 18 y macOS Sequoia a finales de este año y agregará otros modelos de inteligencia artificial de terceros.
VALORACIONES
Ipek Ozkardeskaya, analista sénior de Swissquote Bank, señala que Apple "se ha quedado fuera de la carrera por la inteligencia artificial", ya que "no ha presentado un plan sólido, mientras que sus competidores tecnológicos, como Microsoft y Google, han estado corriendo sin descanso para sacar los modelos de inteligencia artificial más eficientes e impresionantes para ganar terreno".
No obstante, rara vez la compañía de Cupertino ha sido la primera en adoptar una nueva tecnología. Los 'smartphones' o los relojes inteligentes ya existían antes de que Apple lanzara el iPhone o el iWatch, pero la compañía ha sido capaz de dejar su impronta en dichos campos. Este factor es lo que ilusiona al mercado.
En este sentido, Ozkardeskaya destaca que las acciones de Apple han recuperado gran parte de sus pérdidas relacionadas con la IA gracias a la esperanza de que finalmente se produzca una asociación que haga que los dispositivos de Apple "vuelvan a ser atractivos".
"Afortunadamente, muchos inversores no ven a Apple como una empresa de tecnología punta, sino más bien como una marca de lujo que vende millones de equipos que podrían albergar cualquier modelo de IA razonablemente apreciado. Pero todo el mundo está de acuerdo en que Apple debe desarrollar su oferta de IA rápidamente, y la WWDC de esta semana es una línea en la arena. O Apple presenta un plan de IA satisfactorio y ve cómo el precio de sus acciones alcanza un récord, o la semana terminará con decepción y Apple devolverá las ganancias relacionadas con la IA. Lo que es seguro es que el mundo está mirando", sentencia.
