- Poco antes del cierre del mercado, Almirall ha enviado un nuevo comunicado en el que se muestran unas ganancias de 27,1 millones de euros en 2017, frente a las pérdidas de 303,9 millones que mostraba el primer Hecho Relevante enviado
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Almirall se ha hundido este viernes en bolsa (-4,94%) tras comunicar que perdió 303,9 millones de euros en 2017 frente al beneficio de 75,4 millones de euros de 2016 y, poco antes del cierre, informar de forma contradictoria que el pasado ejercicio obtuvo un beneficio neto de 27,1 millones de euros, frente a los 83 millones del ejercicio anterior. De esta manera, según la última información aportada por la compañía, habría descendido sus ganancias un 67% entre 2016 y 2017.
La compañía remitió en un primer momento un comunicado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) alegando que había envidado "por error" un anterior hecho relevante con las cuentas al regulador, pero que dicho documento "no permite una interpretación completa de los resultados de 2017 consolidados". Almirall añadía que la totalidad de las cuentas anuales consolidadas serán publicadas después del cierre de mercado, así como el nuevo 'guidance' (objetivos) de 2018.
"En estas cuentas aprobadas por el Consejo de Administración, se podrá apreciar el cumplimento del Guidance 2017, en cuanto a Total Revenues y EBITDA del grupo Almirall", precisaba la compañía en ese segundo hecho relevante enviado a la CNMV.
A pesar de esta aclaración, y la posterior comunicación, los títulos de Almirall han caído tras conocerse esta entrada de la empresa en pérdidas. Según el documento enviado "por error" a la CNMV, los ingresos en 2017 alcanzaron los 639,38 millones y fueron un 16,35% inferiores a los 2016.
Además, después del cierre del mercado, desde la empresa han querido recalcar a 'Bolsamanía' que los 75,4 millones de euros correspondientes a 2016 son "un beneficio neto normalizado, es decir, el beneficio sin tener en cuenta lo que no es recurrente", mientras que las pérdidas de 303,9 millones de euros de 2017 son "el impairment (deterioro)", "una pérdida contable" que "no afecta en caja", según han asegurado.
TRAS LAS PÉRDIDAS, GANANCIAS
Antes del cierre del mercado, la empresa comunicó una nueva información financiera relativa al ejercicio de 2017. En estos nuevos datos, se reflejan un beneficio neto de 27,1 millones de euros el pasado año, además de unos ingresos totales de 755,8 millones de euros (un 12% inferiores a 2016), un margen bruto de 411,3 millones de euros (un 23% menos que el ejercicio anterior) y un EBITDA de hasta 142,2 millones de euros (un 37% inferior al año anterior).
De esta manera, el consejero delegado de la compañía Peter Guenter, ha declarado que "2017 ha sido un año desafiante para Almirall". Ha opinado que, a pesar de que el año "no evolucionó como inicialmente se esperaba, la dirección de la compañía puso en marcha una serie de medidas para hacer frente a las presiones adversas que impactaron en el negocio de EEUU". Y concluye que todos esos cambios permiten a la empresa "afrontar el 2018 con confianza".
Almirall no está pasando por su mejor etapa. En julio del año pasado, la compañía se desplomaba en bolsa tras lanzar un 'profit warning' y recortar estimaciones de ingresos, ventas y EBITDA para este año debido a sus problemas en el negocio estadounidense. Almirall explicaba entonces que "mientras que el rendimiento del negocio sigue en línea con las expectativas en Europa y en el resto del mundo, el negocio estadounidense, operado por Aqua (...), se está viendo afectado negativamente".