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Almirall ha ganado un 62,5% más en el primer trimestre, hasta los 48,6 millones de euros. Los ingresos totales se incrementaron un 7% (247 millones) y el EBITDA subió un 10,1%, hasta los 88 millones.
Los expertos de Renta 4 señalan que estos resultados han superado sus estimaciones y las del consenso tanto en ingresos (+5% y +11%, respectivamente) como en EBITDA (+18% y +24%, respectivamente).
Las ventas netas avanzan un 8% (frente al -2% del consenso). La caída en ventas de su medicamento Aczone es más que compensada por la buena evolución del resto de productos, favorecidos por las buenas dinámicas pre-pandemia y la sobrecompra/acopio de medicamentos, especialmente en marzo, motivadas por la crisis sanitaria del Covid-19.
Almirall mantiene su actividad sin impactos relevantes en la cadena de producción al ser considerada industria esencial. Sí se han visto alteradas las actividades de la red comercial a causa del confinamiento (más actividad digital), que provocará una ralentización en el crecimiento de Skilarence, Ilumetri y Seysara, aunque en línea con lo anticipado. El margen bruto cae hasta el 68% (-5 pp frente al primer trimestre de 2019) debido a la llegada del genérico de Aczone.
De cara al resto del año, los expertos de Renta 4 afirman que cabría esperar que la contención de gastos sea más que suficiente para compensar posibles caídas en las ventas. La deuda neta se sitúa en 465 millones (frente a los 455 millones en diciembre de 2019), equivalente a un ratio DN/EBITDA de 1,5 veces. Renta 4 subraya que no hay vencimientos relevantes a corto plazo.
Almirall ha reiterado la guía para el conjunto del año de avance de las ventas netas de dígito medio simple y un EBITDA en el rango 260-280 millones de euros. La compañía se dispara un 7% en bolsa.
