El fabricante de pintura holandés Akzo Nobel registró unas ganancias planas en el cuarto trimestre de 2018 al mantenerse en los 240 millones de euros, según ha informado la compañía este miércoles. Sin embargo, superó las expectativas, ya que los analistas esperaban que fueran de 235 millones de euros.
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Akzo Nobel se vio afectada por todos los factores macroeconómicos que han impactado en los inversores en 2018, y seguiría siéndolo en 2019, incluida la guerra comercial entre Estados Unidos y China, el plan británico de abandonar la Unión Europea y las altas tasas de inflación en varios mercados en desarrollo, explica el director ejecutivo, Thierry Vanlancker.
Para 2019, la compañía holandesa prevé que las presiones sobre los costes de las materias primas se reduzcan, a la vez que espera que las caídas en el volumen de ventas en China se alivien, después de que haya descendido un 7% en el cuarto trimestre de 2018. Espera que las cifras allí "realmente se normalicen mucho más en el próximo año".
En cuanto a los objetivos financieros, Akzo Nobel considera que se mantendrán los actuales, con un retorno del 15% en ventas e inversiones para 2020.
"Las tendencias de la demanda difieren según la región y el segmento en un entorno macroeconómico incierto", dijo la compañía, que espera "que la inflación de las materias primas continúe durante el primer semestre de 2019, aunque a una tasa inferior a la de 2018".
