Las aerolíneas españolas siguen sin levantar cabeza y, este verano, aspiran a operar el 58% de los vuelos que se realizaron en la misma temporada estival pero del 2019, justo antes del inicio de la pandemia.
Así lo señalan las últimas previsiones publicadas por la Asociación de Líneas Aéreas (ALA). Su presidente, Javier Gándara, señala que hay que tomarse estos datos "con muchísima cautela".
En este sentido, ha destacado que las perspectivas para la temporada que comenzaba en octubre marcaban que se realizaría un 75% de los vuelos con respecto a un año antes, pero la llegada de la tercera ola solo permitió que se operara el 35%. En total, entre octubre de 2020 y marzo de 2021 los vuelos han caído un 83% en comparación con el periodo anterior a la pandemia.
Por ello, ALA insta a "poner los cimientos" para reactivar el tráfico aéreo de manera constante y que no se trunque "como en pasadas ocasiones". En opinión del presidente de la asociación, Europa se está "quedando rezagada" respecto a otros mercados domésticos, como el de China o Estados Unidos, que prevén alcanzar próximamente los niveles anteriores a la pandemia.
De esta forma, cree que "no es descartable" que las compañías aéreas europeas "tarden más en llegar a los niveles anteriores a la pandemia". Además, ha incidido en que en el caso de Europa también influye el diferente carácter de las ayudas que ha dado cada uno de los estados a las compañías.
Así, ALA considera necesario que se tomen medidas para reactivar el sector y recuperar la confianza en el transporte aéreo. Para ello, propone que España implemente algunas medidas como seguir el ejemplo de Grecia, que ha anunciado que aceptará a turistas internacionales vacunados sin necesidad de PCR ni cuarentenas, así como aceptar los test de antígenos como alternativa a las PCR, la creación de acuerdos bilaterales y la extensión de los expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE) hasta diciembre de 2021.
Sobre los ERTE, ha señalado que el sector mantenía, en el mes de marzo, más de 14.000 trabajadores acogidos a este recurso, el 81% de los más de 17.000 incluidos durante el primer estado de alarma.