El alcaldable de ERC en Barcelona, Ernest Maragall, ha logrado este domingo ganar las elecciones a la Alcaldía a la candidata de BComú, la alcaldesa Ada Colau, con pocos votos de diferencia y empatados con diez concejales, en un pleno de 41.
Con el 98,4% escrutado, la ERC de Maragall ha doblado los concejales que consiguió en 2015, y Colau ha obtenido también diez --pierde uno--, con unos 4.600 votos menos que los republicanos: ella ha contabilizado 153.754, y él 158.412.
El PSC tendrá ocho ediles --el doble que en 2015--; BCN Canvi-Cs de Manuel Valls, seis; JxCat de Joaquim Forn, cinco, y el PP, dos, mientras que la CUP se queda fuera.
La participación ha aumentado cinco puntos porcentuales en la capital catalana respecto a las elecciones municipales de 2015: entonces fue del 60,6%, y este domingo ha sido del 65,44%. Maragall ha logrado el 21,35% de los apoyos, mientras que Colau ha acumulado el 20,73%, en la que ha sido la victoria más ajustada en democracia en la ciudad --hasta ahora lo era la de los últimos comicios, en los que Colau venció al exalcalde Xavier Trias--.
El PSC ha conseguido el 18,43% de los votos --más de 136.700-- y el doble de concejales que en 2015, seguido por el exprimer ministro francés, con el 13,21% --más de 97.974-- y seis ediles, sumando uno a los que Cs ha tenido este mandato en el consistorio.
JxCat, encabezada por Forn desde prisión y con Elsa Artadi como número dos, ha obtenido el 10,45% de los votos y ha conseguido cinco concejales, la mitad de los que obtuvo en 2015 --aunque durante el mandato ha perdido uno, que pasó a no adscrito, algo que también ocurrió en ERC--.
El PP, aunque pierde un edil y se queda con dos, ha conseguido mantener su representación en el Ayuntamiento, como pretendía el partido cuando fichó a Bou --candidato independiente que venía de Empresaris de Catalunya--, que ha logrado el 5,02% de los apoyos, al límite de lo necesario para entrar. La normativa electoral municipal prevé que sea alcalde el más votado aunque no consiga el apoyo de la mayoría del pleno, por lo que lo más probable es que Maragall sea el nuevo primer edil, ya que difícilmente otro podría obtener apoyos suficientes, incluida Colau.
LA CUP, SIN REPRESENTACIÓN
La CUP, con Anna Saliente al frente de la lista, no ha conseguido repetir en el Ayuntamiento, y se ha quedado con el 3,88% de los apoyos y con 28.951 votos, por lo que el consistorio pasará de tener siete grupos municipales a seis.
Por detrás de la CUP ha quedado la candidatura del promotor de unas primarias para una candidatura independentista unitaria, Jordi Graupera, que no logró convencer al resto de partidos independentistas para articular esta lista unitaria.
Graupera, liderando la lista BCap-Primàries, ha acumulado el 3,71% de los votos de la ciudad --ha quedado cerca de la CUP--, a mucha distancia del siguiente en apoyos: Vox, que se ha quedado en el 1,16% de los votos en la ciudad.
CAMBIOS DESDE 2015
Los resultados de este domingo alteran considerablemente el orden de los partidos en el consistorio: ERC pasa de cuarta a primera; BComú, de primera a segunda; el PSC, de quinta a tercera; BCN Canvi-Cs es cuarta y Cs era tercera; JxCat --antes CiU--, pasa de segunda a quinta, y el PP se queda sexta, como en el pasado mandato.
En las municipales de 2015, la candidatura de Colau ganó cosechando el 25,21% de los apoyos --176.612 votos--, seguida de CiU, entonces encabezada por el exalcalde Xavier Trias, que obtuvo un 22,75% y 159.393 votos, siendo la victoria más ajustada hasta ese momento Cs se sitúo en la tercera posición, con el 11,03% y 77.272 papeletas, seguida por ERC, con el 11,01% (77.120 votos); el PSC, con el 9,63% (67.489 apoyos); el PP, que obtuvo un 8,71% y 61.004 papeletas; y la CUP Capgirem, con un 7,42% y 51.945 votos --han perdido más de un tercio--.