La investidura de Pedro Sánchez está condenada al fracaso. Después de que este miércoles por la noche el PSOE diera por rotas las negociaciones tras su última oferta a Podemos y de una contraoferta de la formación de Pablo Iglesias en la que reduce sus exigencias, pero mantiene sobre la mesa el control del Ministerio de Trabajo, ahora mismo “está muy difícil” que el presidente en funciones obtenga en el Congreso la mayoría simple que requiere para revalidar el cargo, indican fuentes socialistas a Bolsamanía.
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Explican que “de momento” el partido morado no apoyará a Sánchez en la segunda votación de la sesión de investidura que se producirá no antes de las 14.30 horas de este jueves. Los socialistas han rechazado la última propuesta del equipo negociador morado encabezado por Pablo Echenique que rebaja la lista de ministerios, pero sigue incluyendo la cartera que daría la llave de las políticas de empleo a los podemitas. Este extremo es inaceptable para el PSOE y desde la formación reconocen a este medio que el problema, a escasas horas para que la Cámara Baja deba decidir el destino de Sánchez, es “fundamentalmente” el empecinamiento del partido de extrema izquierda con este ministerio.
“Seguimos con nuestra oferta”, insisten desde el partido de centroizquierda. El PSOE esta dispuesto a garantizar a Podemos una vicepresidencia de Asuntos Sociales y tres ministerios: Vivienda y Economía Social; Sanidad, Asuntos Sociales y Consumo e Igualdad. “Si les parecen ministerios “decorativos” el problema es de Podemos”, lamentan las mismas fuentes.
Además de la cartera de la discordia, el último documento de los de Pablo Iglesias refleja que reivindican una vicepresidenta de Derechos Sociales, el Ministerio de Sanidad y Consumo y la cartera de Ciencia y Universidades. Por lo que son las políticas laborales en manos del partido morado lo que se le atraganta a los socialistas, muy presionados por el empresariado en este extremo, según indican varias fuentes.
A pesar de que el presidente del Círculo de Empresarios, Jon de Zulueta, ha negado que hayan presionado al PSOE para que la cartera de Trabajo no caiga en manos de Podemos, ha reconocido que "si la ultraizquierda llega al Gobierno sería nefasto para los empresarios". Así se ha expresado en una entrevista en la Cope, en la que ha dicho que prefieren una repetición de elecciones.
En su opinión, lo mejor para el país sería "un pacto con PSOE, PP y Ciudadanos, un pacto a la alemana con gobierno de coalición o abstención con un apoyo programático, pero Sánchez no ha hecho ninguna oferta" en este sentido, ha lamentado.
