- Yellen sostiene que, gracias a las reformas, "los bancos son más seguros"
Janet Yellen ya ha inaugurado oficialmente el simposio de Jackson Hole. Y lo ha hecho sin referencias directas a futuras subidas de los tipos o a la reducción del balance de la Reserva Federal (Fed). Lo que sí ha hecho es sacar pecho por las medidas adoptadas en la última década. "Las reformas han fortalecido la resistencia del sistema financiero", ha proclamado.
En su intervención, la presidenta del banco central de Estados Unidos se muestra convencida de que las reformas emprendidas desde 2007, como las que exigen más capital a los bancos o los periódicos tests de estrés a los que se somete al sector, sirven para apuntalar un sistema financiero más robusto.
"Los bancos son más seguros", defiende. "El riesgo de sufrir pérdidas por la transformación de plazos [captar dinero a corto plazo para prestarlo a largo] es reducido", añade. Y remata: "Los esfuerzos para mejorar la capacidad de resolver firmas sistémicas han promovido la disciplina de mercado y reducido el problema del 'too big to fail' [los bancos demasiado grandes para caer]".
Hasta tal punto se muestra confiada, que ha matizado que "cualquier ajuste en el marco regulatorio debe ser modesto", y que debe responder a un principio básico: "Preservar el incremento de la resistencia de los grandes bancos y operadores del mercado asociada con las reformas implementadas en los últimos años". O lo que es lo mismo, el grueso del trabajo regulatorio ya está hecho; ahora se trata de no estropear lo que, a su juicio, se ha logrado.
No es la primera vez que Yellen se muestra tan confiada. "Creo que en lo que quede de nuestras vidas no veremos otra crisis como la de 2008", sostuvo a finales de junio. Ahora, aprovechando su presencia en el relevante simposio de Jackson, donde se dan cita cada agosto varios de los principales banqueros centrales y economistas del mundo, afianza ese mensaje al asegurar que las reformas emprendidas en la última década han servido para contar con un sistema financiero más resistente.
John Kenneth Galbraith alertaba del peligro del carácter efímero de la memoria financiera. Yellen apela a ella, a no olvidar "el doloroso coste" de la crisis, como recurso clave para evitar nuevos colapsos
No ha faltado, eso sí, la 'coletilla' de costumbre en estos casos, esa que se usa para decir que nunca se sabe. Y que el riesgo cero no existe, con lo que las autoridades deberán permanecer atentas. "Más pronto que tarde, la evolución del sistema financiero en respuesta a las fuerzas económicas, la tecnología y, sí, la regulación resultará en los riesgos tan familiares para todos de un excesivo optimismo, apalancamiento y transformación de plazos mediante nuevas vías que requerirán respuestas políticas", avisa.
Como prevención, nada como la memoria financiera, esa que el estudioso de las crisis, John Kenneth Galbraith, encontraba tan "efímera". "Reaprendimos esta lección a través del daño infligido por la crisis. Nunca podemos estar seguros que una nueva crisis no ocurrirá, pero si recordamos esta lección en nuestras memorias, junto con el doloroso coste exigido por la reciente crisis, y actuamos correctamente, tenemos motivos para pensar que el sistema financiero y la economía experimentarán menos crisis y se recuperarán de cualquier crisis futura más rápidamente", afirma Yellen.
SIN PALABRAS SOBRE LOS PRÓXIMOS PASOS
Más allá de las referencias al sistema financiero, Yellen no ha hecho demasiadas concesiones. Apenas la alusión a que se ha producido "un sustancial progreso hacia la consecución de los objetivos económicos de la Fed del máximo empleo y la estabilidad de precios".
La ausencia de menciones a cuándo volverá a subir los tipos de interés, situados en el 1-1,25% desde junio, está dando nuevos ánimos al euro. La divisa europea, que esperaba a Yellen en los 1,181 dólares, acelera hasta los 1,193 dólares. Yellen tampoco ha dado pistas sobre cuándo y cómo empezará a reducir el balance de la Fed, más voluminoso que nunca con sus 4,5 billones de dólares y cuyo adelgazamiento, anunciado por la propia presidenta para finales de este año, se presenta como la auténtica prueba de fuego para comprobar la sostenibilidad de la recuperación económica y financiera.
La próxima reunión de política monetaria de la Fed tendrá lugar los días 19 y 20 de septiembre. El mercado sólo otorga un 1,5% de probabilidad a que el banco central estadounidense eleve los tipos de interés en esa cita.