- Si el banco central sorprende y no toca el precio del dinero aumentará la volatilidad en la renta variable y la presión bajista en el dólar
La tranquilidad que viven las bolsas en los últimos tiempos (la lateralidad en el Ibex ya se extiende durante tres semanas) podría romperse este miércoles si finalmente se cumple el escenario que nadie espera y que es altamente improbable: que la Reserva Federal (Fed) estadounidense opte por no subir los tipos de interés.
El mercado espera esta subida, que se ha recogido en el buen comportamiento de los últimos tiempos en los bancos y en otras reacciones, como la rentabilidad del bono a 10 años americano, que no ha parado de caer desde que en marzo se produjera la primera subida de tipos del año por parte de la Fed.
El consenso da una probabilidad de más del 90% a la subida y todo lo que no suponga llevar a cabo esta decisión sería una sorpresa y generaría dudas en los inversores, especialmente a corto plazo, señala Borja Rubio, head of brokerage en España de Orey Financial. "En este caso hipotético (el de no producirse una subida de tipos) el efecto teórico en el corto plazo sería un incremento de la presión bajista par el dólar (acumula una caída de más del 7% en lo que va de año) y un posible incremento de la volatilidad en los índices de renta variable norteamericanos", explica Rubio.
La reunión de la Fed que ha empezado hoy y cuyas conclusiones se conocerán mañana (a las 20 hora española) es la cuarta reunión ordinaria del banco central en lo que va de año. El organismo aún cuenta con otras cuatro oportunidades (julio, septiembre, octubre y diciembre) para cumplir con la hoja de ruta de llevar a cabo tres subidas de tipos en 2017.