François Villeroy ha dejado caer que el BCE, de cuyo Consejo de Gobierno es miembro, puede desacelerar su hasta ahora agresiva compra de bonos. Concretamente, ha pedido que se tengan en cuenta las condiciones financieras más favorables de la región cuando se tome una decisión la próxima semana.
Villeroy, que es además el gobernador del Banco de Francia, ha afirmado que cualquier cambio en el programa conocido como PEPP no equivaldría a un 'tapering' como el anunciado por el presidente de la Fed, Jerome Powell, el pasado viernes.
El gobernador galo insiste en que el BCE debe ser coherente con su proyecto, que ha pasado por la compra agresiva de activos a un ritmo significativamente alto desde el pasado mes de marzo para asegurar que se apoya a la recuperación de la eurozona.
"En volúmenes mensuales, estamos viendo condiciones financieras favorables, y deberíamos subrayar que lo son más que en nuestra última reunión del pasado mes de junio", ha declarado Villeroy a BFM Business. "Tenemos que decidir esos volúmenes mensuales del cuarto trimestre", ha apostillado. Recordamos que el banco central ha comprado deuda a un ritmo promedio de 80.000 millones de euros al mes.
