Las ventas del comercio minorista cayeron en marzo un 1,2% en la eurozona y un 1,1% en toda la Unión Europea (UE) frente al mes anterior, según los datos de Eurostat, la oficina de estadística comunitaria. En comparación con marzo de 2022, el descenso es del 3,8 % en la zona euro y del 4,1% en la UE.
Por sectores, en términos intermensuales, en la zona euro el volumen minorista disminuyó un 1,4% para alimentos, bebidas y tabaco y un 1,1% para productos no alimentarios, mientras que aumentó un 1,6% para combustibles de automoción. En la UE, cayó un 1,2% para alimentos, bebidas y tabaco y un 1,1% para productos no alimentarios, mientras que creció un 1% para combustibles para automóviles.
Por países, las mayores disminuciones mensuales se registraron en Letonia (-2,7%), Alemania y Polonia (ambos -2,4%) y Luxemburgo (-1,9%). Los mayores aumentos se observaron en Rumanía (2,9%), Portugal (2,3%) e Irlanda (1%).
En términos interanuales, en la eurozona, las ventas descendieron un 6,8% para alimentos, bebidas y tabaco y un 2,2% para productos no alimentarios, mientras que crecieron un 3,5% para combustibles de automoción. En la UE, el volumen del comercio minorista disminuyó un 6,6% para alimentos, bebidas y tabaco y un 3,2% para productos no alimentarios y aumentó un 2,8% para combustibles para automóviles.
Entre los Estados miembros para los que se dispone de datos, las mayores disminuciones anuales en el volumen total del comercio minorista se registraron en Estonia (-13,5%), Hungría (-13,2%) y Eslovenia (-12,8%). Los mayores aumentos se observaron en España (10,8%), Rumanía (7,2%) y Chipre (5,6%).
"El desplome de marzo significa que los volúmenes de ventas minoristas de la eurozona cayeron un 0,4% intertrimestral en el primer trimestre, después de caer un 1% en el cuarto trimestre, lo que reafirma nuestra opinión de que el gasto de los hogares en general cayó en el primer trimestre, aunque probablemente un poco menos que en el cuarto trimestre", afirman los analistas de Pantheon Macroeconomics.
De cara al futuro, "el continuo aumento de la confianza del consumidor y la probable caída de la inflación significan que los volúmenes de ventas minoristas tendrán mejores resultados en el segundo trimestre. Pero el rebote será limitado", creen. Como añaden , "los valores de ventas también cayeron en marzo, lo que destaca que no son solo los precios los que controlan las ventas, sino también una debilidad en la demanda subyacente".
"Es probable que el repunte de las ventas minoristas sea débil hasta que la inflación caiga mucho más o el crecimiento de los salarios se recupere lo suficiente como para compensarlo", aseguran.