"La economía de la eurozona podría tocar fondo en el primer trimestre de 2024". Así lo prevén en S&P Global Ratings, donde creen que las perspectivas para la zona euro sugieren un aterrizaje suave como el escenario más probable en el corto plazo.
Los ingresos reales aumentarán debido a la desinflación y los mercados laborales mantendrán su resiliencia, según queda reflejado en el informe sobre 'Perspectivas económicas de la zona del euro en el primer trimestre'.
S&P Global Ratings calcula que la inflación en la eurozona probablemente disminuirá dos puntos porcentuales, hasta un promedio del 2,9% en 2024 y los salarios aumentarán un 4%.
El empleo se estancará. "Las vacantes de empleo disminuyeron pero siguen siendo altas según los estándares históricos, lo que reduce la probabilidad de un aumento en las tasas de desempleo durante los próximos 12 meses", apunta el documento.
No obstante, aunque esperan que el patrón de desaceleración económica continúe durante el primer semestre de 2024, destacan que el panorama cambia. El fuerte impulso de los servicios está disminuyendo, mientras que la situación en el sector manufacturero está mejorando.
"Esto no significa que la desaceleración haya terminado, pero sugiere que podríamos haber llegado al punto más bajo de la recesión manufacturera en Europa", ha afirmado el economista jefe de S&P Global Ratings para EMEA, Sylvain Broyer.
