En las primeras semanas de desescalada se han comenzado a vislumbrar señales de recuperación en el consumo. De hecho, el gasto fuera del hogar ya representa la mitad de los niveles que había antes de que se decretara la pandemia, mientras que el uso de la tarjeta para abonar las compras ha ido recuperándose y ya solo es un 14% menor que antes del confinamiento.
Durante las semanas de confinamiento, cerca del 70% de los españoles aseguraban que volverían a consumir productos fuera de casa en cuanto fuera posible. Y así ha sido. Según un estudio de Kantar, en la tercera semana de desescalada se puede apreciar cómo el consumo que se ha realizado fuera de casa ya ha alcanzado una dimensión promedio del 44% con respecto al dato acumulado de las cinco semanas previas a la crisis sanitaria.
No obstante, la recuperación no está siendo igual en todas las zonas. Madrid y Barcelona, por ejemplo, donde la fase 0 se alargó una semana más que en muchas otras provincias, están evolucionando de una forma más lenta.
El uso de la tarjeta está demostrando también los buenos augurios para el consumo. Si durante las primeras semanas de abril se registró una reducción del gasto semanal con tarjeta en torno al 60%, en la semana del 25 al 31 de mayo la merma se ha situada en el 14%, como apunta un informe de BBVA Research.
Detallan que tanto la flexibilización de las restricciones como, sobre todo, el cambio de fase han impulsado al consumo. Y aquí también se aprecian diferencias entre provincias. La semana pasada, el consumo aumentó un 8% en las provincias que entraron en fase 2, al tiempo que el ajuste del gasto se redujo ligeramente en las que accedieron a la fase 1, aunque todavía exhibieron caídas del 15%.
Por su parte, el servicio de análisis del banco destaca que el avance de la desescalada ha impulsado las compras presenciales (-14%), lo que ha invertido el diferencial de crecimiento con las compras por Internet (-28%). El peso del gasto online se ha reducido hasta el 15% del total, frente al 18% de hace un año.
RETIRADA DE EFECTIVO
Las retiradas de efectivo en cajeros han recuperado un 50% de su actividad con respecto a las semanas iniciales del confinamiento, si bien todavía no se ha vuelto a los niveles de antes de la pandemia por el covid-19, a la espera de una mayor actividad económica en las comunidades de Madrid y Cataluña que todavía no han accedido en su totalidad a la fase 2.
Así lo recoge un estudio realizado por la Asociación Profesional de Compañías Privadas de Servicios de Seguridad (APROSER) con datos de empresas de transporte de fondos, que explican que desde el inicio del estado de alarma se ha registrado un descenso generalizado del consumo, con la consecuente caída en los diferentes sistemas de pago. Sin embargo, tras la relajación de las restricciones en todo el país, ha comenzado a observarse cierta recuperación en determinados ámbitos, aumentando los que han acudido a los cajeros a retirar efectivo para hacer frente a sus gastos diarios.