Las economía del sector manufacturero de la zona euro continuaron debilitándose a principios del año, aunque a un ritmo notablemente más lento, como no lo hacía desde abril de 2019. La categoría de bienes de consumo registró el mejor resultado, en un entorno en el que la confianza empresarial aumentó en enero hasta el nivel más alto en dieciséis meses, según el índice PMI publicado este lunes.
Después de tener en cuenta los factores estacionales, el índice PMI del sector manufacturero de la zona euro, elaborado por la consultora Markit, se situó en 47,9, ligeramente por encima de su lectura precedente y del nivel 46,3 señalado en diciembre. Aunque el índice ha registrado un resultado por debajo del nivel de ausencia de cambios de 50 durante doce meses consecutivos, la última lectura fue la más alta desde abril de 2019.
A nivel de grupos de mercado, la categoría de bienes de consumo continuó registrando el mejor resultado en enero, señalando un crecimiento marginal por segundo mes consecutivo. En contraste, los sectores de bienes intermedios y de bienes de capital continuaron contrayéndose, aunque a ritmos más lentos.
La producción manufacturera y los volúmenes de nuevos pedidos de la zona euro continuaron disminuyendo a principios de 2020, aunque a ritmos más débiles que a finales de 2019. La modesta caída de la producción extendió el periodo actual de desaceleración a doce meses, mientras que los nuevos pedidos han disminuido ininterrumpidamente desde octubre de 2018. No obstante, el ritmo de declive de los nuevos pedidos fue el más lento en más de un año, ayudado en parte por solo una reducción marginal de los nuevos pedidos para exportaciones.
Alemania fue de nuevo el país con el resultado más débil, liderando en términos de destrucción de empleo
También se registraron pérdidas de empleo por noveno mes consecutivo. Aunque la contratación no disminuyó en el mismo grado que el récord de casi siete años observado en diciembre, la tasa de destrucción de empleo se mantuvo marcada.
Por países, Alemania volvió a liderar en términos de destrucción de empleo, seguido de España, donde la fuerza laboral disminuyó a la tasa más fuerte en más de seis años. En el sector manufacturero en general, Grecia registró el mejor resultado, señalando un incremento que alcanzó su máximo en cinco meses. Irlanda y Francia fueron los otros dos países que registraron una expansión, aunque los ritmos de crecimiento fueron moderados. Alemania fue de nuevo el país con el resultado más débil, a pesar de que su respectivo índice PMI alcanzó su máxima en once meses. Se observaron modestos deterioros de las condiciones operativas en Italia y España, mientras que Austria y los Países Bajos experimentaron declives leves.
De cara a los próximos meses, la confianza con respecto al futuro aumentó a principios de 2020 hasta su nivel más alto desde agosto de 2018. La mejora de las expectativas también fue generalizada, y el optimismo estuvo liderado por Grecia, Irlanda y los Países Bajos. La confianza más baja siguió registrándose en Austria y Alemania a pesar de alcanzar sus máximas de 16 y 17 meses respectivamente.
Desde Markit señalan que "el sector manufacturero de la zona euro comenzó 2020 con brotes verdes de recuperación a la vista" y que "lo más alentador es que las carteras de pedidos se acercaron a la estabilización, disminuyendo al ritmo más lento desde fines de 2018".
También consideran que "la mejora fortalece nuestra opinión de que podríamos observar un crecimiento fortalecido de la economía de la zona euro en los próximos meses, lo que significa que el BCE pospondrá cualquier cambio de política y en su lugar se centrará en su revisión estratégica. Sin embargo, los riesgos clave que podrían afectar las perspectivas alentadoras incluyen la amenaza de los aranceles estadounidenses y la escalada de la guerra comercial, las perturbaciones del comercio relacionadas con el Brexit y la incertidumbre en torno al impacto del coronavirus de Wuhan".