El índice PMI del sector manufacturero español mantiene su modesto crecimiento en marzo. "Mientras que la industria en la zona euro ha estado languideciendo durante mucho más de un año y medio, la situación en España se ha recuperado por segundo mes consecutivo".
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La estimación en tiempo real del PIB calcula una sólida tasa de crecimiento del 1% en el primer trimestre, "una cifra con la que la zona euro sólo podría soñar", señalan en Hamburg Commercial Bank.
Así, el índice PMI del sector manufacturero español se movió lateralmente en marzo, indicando otra leve mejora de las condiciones operativas. Después de tener en cuenta los factores estacionales, se situó en 51,4, apenas sin cambios con respecto a la máxima de veinte meses registrada en febrero (51,5).
El crecimiento de la producción se aceleró en marzo hasta alcanzar su nivel más alto en 12 meses en medio de informes de un aumento en los volúmenes de nuevos pedidos. Las empresas encuestadas informaron que los nuevos pedidos se acrecentaron por segundo mes consecutivo, aunque levemente y en menor medida que en febrero. Los encuestados comentaron que las ventas aumentaron gracias a la mejora de la demanda del mercado, especialmente del extranjero. Los nuevos pedidos de exportación aumentaron levemente, pero no obstante, por primera vez en poco más de dos años. Hubo informes de que las ventas en los principales mercados europeos mejoraron.
Para ayudar a satisfacer las mayores necesidades de producción las empresas reforzaron sus actividades de compra. Los últimos datos indicaron que el crecimiento fue el más fuerte registrado desde mayo de 2022, aunque las empresas todavía dependieron hasta cierto punto del inventario existente: los stocks de compras disminuyeron por duodécimo mes consecutivo en marzo.
ESPERANZAS DE UNA MEJORA ECONÓMICA
No obstante, los pedidos pendientes de realización siguieron aumentando a pesar de que las empresas aumentaron sus niveles de personal al ritmo más intenso en más de dos años. Comentaron que contrataron personal adicional para ayudar a satisfacer las mayores necesidades de producción y en previsión del crecimiento. Las expectativas de la producción volvieron a ser elevadas, aunque disminuyeron un poco frente a febrero. Hay esperanzas generalizadas de una mejora de la situación económica y un aumento asociado de las ventas y, en consecuencia, de la producción.
Mientras tanto, los precios de los insumos aumentaron nuevamente en marzo, generando un alza de los costes de los insumos por segundo mes consecutivo. La tasa de inflación fue modesta, aunque sigue siendo la más alta desde febrero de 2023. El incremento de los precios estuvo relacionado en parte con la escasez de productos y los retrasos en las entregas. Aunque no se deterioró en la misma medida que en febrero, el alargamiento de los plazos medios de entrega de los productos fue todavía marcado. Los encuestados informaron que las dificultades en el mar Rojo y, por extensión, en el canal de Suez provocaron retrasos en las entregas.
Por último, los precios medios cobrados siguieron disminuyendo. Los precios de venta cayeron por duodécimo mes consecutivo en marzo. No obstante, la reducción de marzo fue modesta y la más débil desde abril de 2023. Las empresas que redujeron sus tarifas comentaron que el entorno empresarial seguía siendo competitivo y se caracterizaba por una demanda relativamente decepcionante.
"¿Es España realmente parte de la zona euro? Por supuesto, pero si nos fijamos en el sector manufacturero, se podría pensar que no lo es", exponen en Hamburg Commercial Bank, donde creen que es "alentador observar que no sólo aumentó la producción en febrero y marzo, sino que también se recibieron más pedidos en ambos meses. El impulso de los nuevos pedidos todavía deja mucho que desear, pero al menos esto marca el final de un periodo de diez meses de caída de los pedidos. En consonancia, las carteras de pedidos también se vieron respaldadas recientemente por un mayor número de pedidos procedentes del extranjero".
Por lo tanto, consideran que también debería ser posible un crecimiento moderado de la producción en los próximos meses. Además, destacan que "los empleados en España pueden estar satisfechos. Esto se debe a que las empresas del sector manufacturero han vuelto a contratar personal desde febrero y recientemente incluso lo han hecho con mayor intensidad".
Sin embargo, "en paralelo con el aumento del empleo, los precios de los insumos que afrontaban los fabricantes aumentaron en marzo a un ritmo ligeramente más rápido. No obstante, las empresas todavía se vieron obligadas a reducir los precios de venta, aunque pudieron reducirlos un poco menos que el mes anterior".
Además, "la recuperación moderada está distribuida de manera desigual. Desde hace varios meses se observa un impulso relativamente fuerte en el sector de bienes de consumo. La industria de bienes intermedios acaba de regresar a territorio expansivo en marzo. Por el contrario, la situación en la industria de bienes de capital ha vuelto a deteriorarse tras observarse una sorprendente recuperación en febrero. No obstante, la tendencia de varios meses del correspondiente índice PMI también aquí sigue apuntando al alza", concluyen.
