• Los volúmenes de negociación del bitcoin están subiendo mientras que la volatilidad está bajando
  • Para operar con criptodivisas, hay que tener en cuenta la prima de riesgo tecnológica y regulatoria
bitcoin

El vaivén de los precios que el bitcoin y el mercado de las criptodivisas han sufrido desde que el pasado 2 de septiembre se rebasaran todas las expectativas de crecimiento, cuando el llamado ‘oro 2.0’ superó los 5.000 dólares, sigue suscitando el recelo de los inversores. Los fondos tradicionales, firmas de inversión y brokers empiezan, no sin reparos, a tomar posiciones en estos activos, mientras la volatilidad continúa dominando su operativa, aunque desde Saxo Bank avisan que se irá reduciendo paulatinamente.

Los activos virtuales están sujetos a movimientos de gran violencia debido a su escaso volumen y a su inmadurez. “Pero a medida que aumenta la negociación del bitcoin, la volatilidad se reduce”, apunta Kay Van-Petersen, estratega de Saxo Bank. De hecho, la capitalización de mercado de las más de 850 divisas virtuales existentes se ha incrementado cerca de un 100% este año. “Mucha gente habla de la volatilidad de esta criptodivisa, pero si estás en Zimbabwe o Venezuela, no es nada. En Occidente mucha gente ve el bitcoin como algo especulativo, pero en los mercados emergentes es una oportunidad, pues sus necesidades son diferentes”, matiza el experto.

Pero más allá de la inestabilidad de los precios, lo que mantiene a muchos operadores detrás de la barrera es la falta de conocimiento sobre este mercado. “Sus fluctuaciones no obedecen a la prima de riesgo político que sí incide en las monedas soberanas, por ejemplo, o a la evolución de la economía de un país o a las decisiones de los bancos centrales”, explica Alberto Muñoz, profesor de la UNED. En cambio, hay que estar dispuesto a manejar otras variables, aclara Muñoz “como la prima de riesgo tecnológico o la prima de riesgo regulatorio”.

Esta última es la que ha embarcado al mercado de las monedas online en una profunda corrección este mes de septiembre. La prohibición de las colocaciones en criptodivisas, las llamadas ICOs (Initial Coin Offerings) en China, que podría ser la antesala de un mayor control de los reguladores sobre el comercio con divisas digitales, mantiene al bitcoin y a otras monedas similares bajo presión. Ante la ausencia de más medidas concretas por parte del banco central chino, el bitcoin ha recuperado la marca de los 4.350 dólares, después de haber tocado fondo justo por debajo de los 4.000 dólares.

Pero no sólo son los reguladores chinos, hace algunas semanas, la Comisión del Mercado de Valores de EEUU (SEC por sus siglas en inglés), anunció que los tokens criptográficos -las ICOs- deben ser considerados como valores, por lo que deben registrarse. Más recientemente, el principal regulador financiero de Reino Unido (FCA, por sus siglas en inglés) ha advertido del "alto riesgo" que supone el uso de estas emisiones de divisas online como mecanismo para obtener fondos al tratarse de una "inversión especulativa".

De igual modo, la presidenta del Banco de Rusia, Elvira Nabiullina, reflejaba recientemente su desconfianza respecto a las ICOs, y declaraba que "el uso de las criptomonedas como un sustituto del rublo en la adquisición de bienes y servicios tiene el riesgo de debilitar la circulación de dinero. No se permitirá el uso de criptomonedas como dinero sustituto".

“Las criptodivisas representarán el 10% del volumen diario promedio del comercio de divisas en 10 años”

ENFOQUE PRUDENTE

Por este motivo, Van-Petersen avisa que es recomendable “un enfoque prudente a la hora de invertir en criptodivisas”. “Aunque podrían ser una alternativa de inversión estupenda, probablemente no destinando más de un 3% de la cartera, ya que nadie es un experto en criptodivisas y hay muchas incógnitas aún”, matiza el analista del banco de inversión.

Con todo, el experto de Saxo Bank se muestra muy optimista. “No tengo ninguna duda de que las criptodivisas sobrevivirán en el largo plazo. Esto no es una moda, están aquí para quedarse”, afirma. Cree que en el futuro habrá entre dos y tres criptodivisas principales y el bitcoin será una de ellas, "ya que cuenta con la ventaja de ser el más negociado”.

Además, algunos factores impulsarán su uso, “como métodos de compra más fáciles a través de la moneda digital, transferencias de dinero en áreas como las remesas o compras con Bitcoins por parte de ciudadanos de países con economías y monedas volátiles”, puntualiza Van-Petersen.

Por este motivo, el estratega de firma de inversión con sede en Copenhagen cree que “las criptodivisas representarán el 10% del volumen diario promedio del comercio de divisas en 10 años”. Actualmente el mercado de las divisas mueve más de 5 billones de dólares cada día, según el Banco de Pagos Internacionales, por lo que estima que en una década, los inversores negocien 500.000 millones de dólares diarios en ‘criptos’. El Bitcoin, a su vez, representará el 35% de esa cuota de mercado, lo que equivale a 175.000 millones de dólares. Es decir, en una década 175.000 millones de Bitcoins se negociarán diariamente, frente a los 37.800 millones actuales.

El BITCOIN, A 100.000 DÓLARES

Siguiendo con estas cuentas, actualmente el bitcoin tiene una oferta de suministro limitada de 21 millones de dólares, cifra que se espera alcanzar en el año 2140, mientras que en 10 años habrá 17 millones de Bitcoins en circulación, por encima de la actual cifra de 16,3 millones.

Si la potencial oferta de 17 millones de bitcoins se divide por la estimación del volumen diario de 175.000 millones de dólares, entonces cada bitcoin valdrá un poco más de 100.000 dólares en una década.

Aunque este es un cálculo aproximado, “mis predicciones de crecimiento podrían ser ‘conservadoras’, dado que sólo en el año 2013 el precio de Bitcoin creció más de un 5.000%”, concluye el experto de Saxo Bank.

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