El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha anunciado este miércoles que espera y confía en que se alcance un acuerdo antes del próximo 31 de diciembre entre los 27 Estados miembros de la UE. Contando con Hungría y Polonia que se han mantenido muy reticentes con las medidas para recibir, el Fondo de Reconstrucción de 750.000 millones de euros pactado el pasado mes de julio.
"Esperamos y confiamos que podamos llegar a un acuerdo a 27 antes del 31 de diciembre", indicaba Sánchez en la comparecencia conjunta con al presidente del Consejo de Ministros de Italia, Giuseppe Conte, en el marco de la XIX Cumbre Hispano-italiana en Palma (Mallorca). Han tenido ocasión de intervenir diferentes líderes europeos como la presidenta de la Comisión Europea, Usula Von der Leyen, el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, o la canciller alemana Angela Merkel, que ostenta la presidencia rotatoria de la UE.
El encuentro que hemos celebrado hoy demuestra que la cercanía entre España e Italia va más allá de lo geográfico. Compartimos agenda social, sinergias en los planes de recuperación y mantenemos un fuerte compromiso para con nuestras sociedades.
Grazie mille, @GiuseppeConteIT. pic.twitter.com/MY3GKLqDhv
— Pedro Sánchez (@sanchezcastejon) November 25, 2020 ">
El encuentro que hemos celebrado hoy demuestra que la cercanía entre España e Italia va más allá de lo geográfico. Compartimos agenda social, sinergias en los planes de recuperación y mantenemos un fuerte compromiso para con nuestras sociedades.
— Pedro Sánchez (@sanchezcastejon) November 25, 2020
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Sánchez recordaba que en el mes de julio se logro un acuerdo "muy difícil y muy complejo" sobre el marco financiero plurianual y para el Next Generation UE, que ahora se encuentra bloqueado por parte de Hungría y Polonia alegando que el mecanismo que vincula las ayudas al respeto del Estado de derecho tiene una base "ideológica" y no cuenta con las "garantías" adecuadas. El presidente del Gobierno ha subrayado que se ha generado en España una "expectativa" en cuanto a la definición del Plan de Recuperación y un "interés empresarial" respecto a la concreción de los proyectos, así como una inversión privada "muy importante" derivada de la inversión pública prevista y una "movilización de energías positivas muy importante" para las sociedades, que están "cansadas y fatigadas por la pandemia".
Defendía la preservación del acuerdo alcanzado en julio, aludiendo a que "ata a todos los países miembros" y es fruto del "diálogo" entre los Estados miembros en el seno del Consejo Europeo, el Parlamento y la Comisión Europea. Espera que los países que están siendo reticentes con el pacto sean "conscientes" de lo que representa el acuerdo en términos de respuesta a la emergencia económica y social producida por la pandemia y la importancia de alcanzarse antes de que acabe el año. Ayer la vicepresidenta tercera y ministra de Asuntos Económicos y Transformación Digital, Nadia Calviño, aseguraba que el Gobierno tiene la intención de empezar a desplegar medidas del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, junto a inversiones para movilizar la inversión privada y reformas estructurales, a partir del 1 de enero de 2021 si se consigue la aprobación los Presupuestos, con independencia del momento en el que se aprueben en Bruselas los textos, se produzcan las ratificaciones y empiece a fluir la liquidez de los fondos.
A España le corresponden unos 140.000 millones de euros de los fondos europeos entre 2021 y 2026, de los que alrededor de 72.000 millones percibirá vía transferencias hasta 2023. Los nuevos Presupuestos que espera aprobar el Gobierno, contemplan una inversión de 39.000 millones, ya incluyen 27.000 millones adelantados de los fondos europeos. El Gobierno aprobará en diciembre el real decreto-ley que elimina cuellos de botella y agiliza trámites para ejecutar los proyectos.
El presidente del Gobierno valoraba junto a el dirigente italiano los "pasos" dados en el proceso de endeudamiento común para financiar la transición ecológica, digital, la educación, la ciencia o el Estado de bienestar, y ha abogado por hacer de la UE un sistema "mucho más federal". Conte por su parte ha indicado que se trabaja en profundizar el proceso de unión bancaria y monetaria y que en el futuro se tendrán que estudiar mecanismos de mutualización "más estructurados", ya que los Estados no pueden reunirse "constantemente" y preparar instrumentos específicos.