La Reserva Federal de Estados Unidos (Fed) ha optado por volver a mantener los tipos de interés en la horquilla comprendida entre el 5,25%-5,5% por séptima reunión consecutiva. La decisión, que se ha situado en línea con las expectativas, sitúa el precio del dinero en máximos de 23 años. El organismo también ha rebajado su previsión de recortes y ahora estima tan solo una bajada durante 2024.
El Comité ha explicado que en los últimos meses ha habido un "modesto progreso" hacia el objetivo de inflación del 2% del banco central estadounidense y que, aunque los precios han disminuido, "la inflación sigue siendo alta", mientras que los "indicadores recientes sugieren que la actividad económica ha seguido expandiéndose a un ritmo sólido". En el caso del mercado laboral, subraya que el aumento del empleo se ha mantenido fuerte y la tasa de desempleo baja.
Por ello, ha reiterado que su objetivo es el de "lograr el máximo empleo e inflación a una tasa del 2% a largo plazo. El Comité considera que los riesgos para alcanzar sus objetivos de empleo e inflación han evolucionado hacia un mejor equilibrio en el último año. Las perspectivas económicas son inciertas, y el Comité sigue muy atento a los riesgos de inflación".
Del mismo modo, cree que al considerar cualquier ajuste al rango objetivo para la tasa de fondos federales, evaluará cuidadosamente los datos entrantes, la evolución de las perspectivas y el balance de riesgos. Y, por tanto, "no espera que sea apropiado reducir el rango meta hasta que haya ganado mayor confianza en que la inflación se está moviendo de manera sostenible hacia el 2%".
Además, el Comité seguirá reduciendo sus tenencias de valores del Tesoro y deuda de agencias y valores respaldados por hipotecas de agencias.
Tal y como ha señalado en otros comunicados previos, la Fed ha insistido en que estaría "dispuesta a ajustar la orientación de la política monetaria según proceda si surgen riesgos que puedan impedir el logro de los objetivos del Comité".
Sin embargo, toda la atención ha estado puesta sobre la actualización del diagrama de puntos y las proyecciones económicas.
La Reserva Federal ha eliminado dos de los tres recortes de tipos que anticipó en marzo para 2024, y ahora espera solo uno. De cara al año que viene, prevé que las tasas bajen hasta el 4,1%, y el descenso seguiría hasta alcanzar el 3,1% en 2026.
Respecto a la economía, estima que el deflactor PCE subyacente cerrará 2024 en el 2,8%, cuando en marzo apuntaba a un 2,6%. Mientras, considera que el índice general caerá al 2,6% este año, por encima del 2,4% adelantado en marzo, y seguirá su moderación hasta el 2,3% en 2025 (en marzo preveía un 2,2%) y al 2% en 2026.
En relación con la tasa de desempleo, la ha revisado al alza en una décima, hasta el 4,2%, y ha mantenido la previsión de crecimiento económico que lanzó en marzo, por lo que anticipa que el PIB de EEUU crecerá un 2,1% este año, para dar paso a incrementos del 2% tanto en 2025 como en 2026.