La tasa de desempleo de Reino Unido de los últimos tres meses se ha situado en julio en su nivel más bajo desde 1974, ya que ha descendido hasta el 3,6%, desde el 3,8% anterior, según datos de la Oficina Nacional de Estadística.
El dato también ha sido mejor de lo esperado por el mercado, que había previsto que la tasa de paro británica se mantuviera sin cambios.
El informe de empleo británico también muestra que los salarios crecen muy por encima de la media anterior a la pandemia. El descenso de la tasa de paro se vio impulsado por un fuerte aumento de las personas clasificadas como económicamente inactivas, o que no buscan trabajo. Un total de 194.000 personas abandonaron la población activa, la mayor cifra desde el inicio de la pandemia. Parte de ello se debió al aumento de los niveles de enfermedad. Los jóvenes que estaban trabajando también volvieron a estudiar.
En conjunto, las cifras indican una menor capacidad de crecimiento de la economía sin que los salarios y los precios superen el objetivo del 2% fijado por el Banco de Inglaterra. Esto aumenta la presión sobre los responsables de política monetaria para que sigan subiendo los tipos de interés.
Los inversores esperan que el banco central eleve el tipo de interés de referencia al menos medio punto porcentual la próxima semana, desde el 1,75%. Existe la posibilidad de que el Banco de Inglaterra impulse una subida de tres cuartos de punto. Los funcionarios, encabezados por el gobernador Andrew Bailey, han dicho que están preparados para actuar "con fuerza" para contener la inflación, que alcanzó los dos dígitos por primera vez en 40 años.
Otros puntos relevantes del informe de empleo de Reino Unido:
Los ingresos semanales regulares, excluyendo las primas, aumentaron un 5,2% en el trimestre hasta julio, por encima del ritmo del 5,1% que esperaban los economistas y de la media del 3% anterior a la pandemia.
El número de parados ascendió a 1,22 millones, casi igualando los 1,28 millones de vacantes registradas. Ello a pesar de una caída de 34.000 vacantes durante el trimestre, que marcó el mayor descenso desde el verano de 2020.
El empleo aumentó en 40.000 personas en julio, menos de las 125.000 que esperaban los economistas. El tamaño de la mano de obra del Reino Unido sigue siendo 250.000 menos que antes del golpe de Covid-19.
Una cifra récord de 2,46 millones de personas de entre 16 y 64 años fueron clasificadas como enfermos de larga duración, un aumento de 350.000 desde antes de la pandemia.
Los salarios reales regulares ajustados a la inflación cayeron un 2,8% en el trimestre hasta julio, un descenso más lento que el de los meses anteriores.
