El IPC de septiembre de Estados Unidos (EEUU) se presenta como la cita económica más relevante de este jueves y de toda la semana, y los analistas esperan que los precios muestren una nueva moderación, que dejaría la tasa general anual en el 2,3%, dos décimas por debajo del 2,5% de agosto y más cerca del objetivo del 2% de la Reserva Federal. Sin embargo, las previsiones son menos optimistas para la inflación subyacente, que de acuerdo a estas proyecciones se mantendría en el 3,2%.
Entre los que proyectan una bajada al 2,3% se encuentran los analistas de S&P Global Ratings, que anticipan también un incremento mensual del 0,1%, que supondría una desaceleración desde el 0,2% registrado en agosto. En la firma señalan que esto supondría "la inflación más baja desde febrero de 2021", gracias principalmente al efecto de los combustibles.
"Una nueva caída de los precios de la gasolina y el diésel es sin duda una gran ayuda para la Reserva Federal en su lucha por controlar la inflación. Los precios de la gasolina en septiembre promediaron 3,21 dólares por galón, un 16,2% menos que en el mismo período del año pasado, mientras que los precios del diésel se desplomaron un 22,0% en el mismo período", detallan.
Por otro lado, esperan que la inflación subyacente mantenga el ritmo mensual del 0,3% que exhibió en agosto, lo que supondría un 3,1% interanual, por lo que se muestran más optimistas que el consenso de analistas, que apuesta por un 3,2%. A la hora de analizar el detalle, comentan que "la inflación de los servicios ha sido muy persistente, lo que ha sustentado un repunte de los costes de los servicios no relacionados con la vivienda, como los servicios de transporte y los seguros para vehículos de motor".
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Kugler (Fed) "apoyará" más recortes de tipos si la inflación sigue bajandoSea cual sea el resultado, las cifras que se conozcan este jueves serán "cruciales para ver si la desinflación caerá consistentemente hacia la meta del 2%" de la Fed, aunque, en las últimas reuniones, "el mercado laboral ha ocupado un lugar central en las decisiones del Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC)".
"Esperamos que la desinflación continúe. Sin embargo, los riesgos para las previsiones de inflación han aumentado recientemente. Para reunión del FOMC de noviembre hemos previsto un recorte de tipos de 25 puntos básicos. Los datos de empleo de septiembre, junto con las revisiones al alza de los datos de empleo de agosto y julio, probablemente mantengan la bajada de 50 pb fuera de la mesa", añaden.
REPUNTE DE LOS BIENES BÁSICOS
Los analistas de TD Securities esperan que el reporte del IPC de este jueves muestre "que los precios de los bienes básicos aumentaron la inflación por primera vez en siete meses, mientras que la inflación de la vivienda probablemente se enfrió modestamente arrastrando a la baja la inflación de los servicios básicos".
"Nuestras previsiones para el informe del IPC de septiembre sugieren que la inflación subyacente perdió un modesto impulso, registrando un aumento intermensual del 0,24% tras avanzar un 0,28% ligeramente más fuerte en agosto. Es probable que la inflación general haya perdido un impulso significativo, ya que el componente energético volverá a proporcionar un gran alivio", destacan.
Sin embargo, matizan que su pronóstico no redondeado del IPC básico de 0,24% mensual para septiembre "sugiere que los riesgos se inclinan hacia una sorpresa al alza ante un aumento redondeado del 0,3%".
De cara al futuro, esperan que que la inflación general del IPC haga "avances modestos" en 2024, hasta terminar el año en el 2,6% interanual, mientras que proyectan un 3,1% para el índice subyacente. Según sus estimaciones, calculan que "la inflación IPC/PCE volverá al objetivo del 2% o se aproximará a él para el tercer trimestre de 2025".
UN DATO "CRUCIAL PARA LA CONFIANZA DEL MERCADO"
Para Kathleen Brooks, directora de análisis de XTB, el IPC de EEUU de septiembre se antoja "crucial para la confianza del mercado", y apunta que "el riesgo es alcista después de la reciente racha de datos económicos más sólidos de lo esperado, ya que la economía parece haberse vuelto a acelerar a finales del tercer trimestre".
"Si obtenemos una lectura de inflación mayor a la esperada, podría desencadenar una ola de aversión al riesgo a medida que aumentan los rendimientos de los bonos del Tesoro estadounidense y se descartan nuevos recortes de las tasas de interés. En nuestra opinión, también sería positivo para el dólar", pronostica.
Sin embargo, considera que el banco central está más enfocado en la salud del mercado laboral, por lo que "el impacto duradero del informe de empleo del viernes hace que ahora sea muy improbable un recorte de 50 puntos básicos por parte de la Reserva Federal en noviembre".
"El mercado parece haberse decidido por un recorte de 25 pb. El mercado también ha descontado cerca de dos subidas de tipos durante el próximo año, y ahora se esperan poco más de seis recortes de tipos; a principios de octubre, el mercado esperaba casi ocho recortes de tipos. La solidez de los datos del mercado laboral también pone en duda la decisión de la Reserva Federal de recortar 50 puntos básicos el mes pasado y cuestiona la decisión de centrarse en el aspecto laboral de su mandato", añade.
En este sentido, anticipa que "la Fed volverá a preocuparse por la inflación en los próximos meses, ya que el crecimiento salarial medio aumentó hasta una tasa anual del 4% el mes pasado, la más alta desde mayo".