La economía de la eurozona consiguió escapar de la recesión en 2022, año en el que el Producto Interior Bruto (PIB) registró un crecimiento del 3,5%, según la última lectura publicada por Eurostat, la oficina de estadística comunitaria, que recorta una décima su estimación preliminar. Entre octubre y diciembre, el crecimiento económico de la eurozona fue de apenas el 0,4%, estancándose en comparación con los tres meses anteriores.
En toda la Unión Europea (UE), el PIB también aumentó un 3,5% en 2022, mientras que en el último trimestre del año registró una contracción del 0,1%.
Hay que recordar que en 2021, la economía creció un 5,3% en la eurozona y un 5,4% en la UE. En el tercer trimestre de 2022, el PIB aumentó un 0,4% tanto en la zona euro como en la UE.
Por países, Grecia (+1,4%) registró el mayor aumento del PIB en el cuarto trimestre en comparación con el trimestre anterior, por delante de Malta (+1,2%) y Chipre (+1,1%). Los mayores descensos se observaron en Polonia (-2,4%), Estonia (-1,6%) y Finlandia (-0,6%).
Por componentes, entre octubre y diciembre, el gasto de consumo final de los hogares disminuyó un 0,9% en la zona euro y un 0,8% en la UE. El gasto de consumo final del gobierno aumentó un 0,7% tanto en la zona euro como en la UE. La formación bruta de capital fijo cayó un 3,6% en la zona euro y un 2,8% en la UE.
Por su parte, las exportaciones aumentaron un 0,1% en la zona euro y se mantuvieron estables en la UE y las importaciones disminuyeron un 1,9% en ambas zonas.
Aunque los datos muestran que "sigue habiendo una recesión técnica a la vista", las cifras "sumarán a la convicción del Banco Central Europeo (BCE) de una relativa resiliencia económica", consideran los analistas de Pantheon Macroeconomics, dado que el PIB de la zona euro en el cuarto trimestre fue mejor que la caída del 0,2% que esperaba el organismo en diciembre, "por lo que ayuda más a los llamados de los 'halcones' a continuar en un camino de ajuste pronunciado que al llamado de prudencia de los optimistas".
De cara al futuro, prevén que el consumo volverá a caer este trimestre, "ya que la restricción de los ingresos reales sigue siendo conmovedora, los tipos de interés siguen aumentando y los bancos endurecen aún más las normas crediticias".
"El crecimiento del PIB de la eurozona puede haber evitado el signo negativo durante el trimestre, pero la demanda interna sugiere que la economía está en mal estado", apuntan en Oxford Economics.