El PIB de Alemania frena en seco y se contrae un 0,3% en el cuarto trimestre y en 2023

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Estos datos confirman las estimaciones publicadas hace dos semanas, cuando Destatis informó que "el desarrollo económico general en Alemania se estancó en 2023 en un entorno todavía plagado de crisis". Entonces, el organismo federal señaló que los precios se mantuvieron altos y perjudicaron a la economía germana, que vio caer su demanda interna y externa y también sufrió los efectos de los altos tipos de interés impuestos por el Banco Central Europeo (BCE).

Respecto al mismo trimestre del año anterior, el descenso observado en el cuarto trimestre de 2023 fue del -0,4%. Tras el ajuste de precios y calendario, el descenso fue menor (-0,2%), ya que hubo un día laborable menos que en el mismo periodo del año anterior. Además, la oficina estadística recuerda que la economía alemana solo creció un 0,1% en los nueve primeros meses del año después de estancarse en el segundo y tercer trimestre.

"Después de que la economía alemana se estancara más o menos en los tres primeros trimestres, los resultados económicos disminuyeron en el cuarto trimestre de 2023", sentencia Destatis, al tiempo que destaca el "marcado" descenso de la formación bruta de capital fijo en construcción y en maquinaria y equipo tras el ajuste de precios, estacional y de calendario.

Los expertos de Pantheon Macroeconomics opinan que Alemania fue "el eslabón más débil" de la eurozona en el cuarto trimestre y que 2023 fue un "año para el olvido". "Ya sabíamos que la economía alemana había sufrido un retroceso en el 4T, gracias al PIB de todo el año publicado a mediados de enero. La publicación de hoy confirma la magnitud de la caída del PIB y añade algo de color a lo sucedido. Hay que tener en cuenta que los datos de los tres primeros trimestres han sido revisados: los descensos del primer y el tercer trimestre han sido eliminados, al igual que el aumento del segundo. La economía alemana se estancó en cada uno de los tres primeros trimestres del año pasado", apuntan.

"Sospechamos que Alemania habrá conseguido recuperarse del desplome del cuarto trimestre en el primer trimestre (de 2024). Esperamos que el PIB se estanque, pero los riesgos se inclinan a la baja dada la subida de impuestos a principios de año, que está pesando sobre la confianza de los consumidores, y el sentimiento empresarial, aún débil", señalan estos expertos.

Recientemente, el ministro de Finanzas alemán, Christian Lindner, describió al país como "el hombre cansado de Europa después de una noche corta". "Las expectativas de bajo crecimiento son en parte una llamada de atención, y ahora tomamos una buena taza de café, lo que significa reformas estructurales, y entonces seguiremos teniendo éxito económico", señaló en el Foro de Davos.

Asimismo, a finales de año el Gobierno que lidera el canciller Olaf Scholz llegó a un acuerdo para asegurarse la aprobación de los presupuestos de 2024, en los que se mantendrán las restricciones de deuda con las que el Gobierno pretende ahorrar aproximadamente 17.000 millones de euros.

Cabe recordar que la inflación de Alemania subió al 3,7% en diciembre por el efecto de la energía y que el índice Ifo de clima empresarial cayó a un mínimo de seis meses este enero al contraerse hasta los 85,2 puntos.