El paquete para enfrentar la pandemia del Covid-19 aprobado por Alemania, de 130.000 millones de euros, supera todas las estimaciones y demuestra, en opinión de Berenberg, que Alemania "está lista y es capaz de gastar cuando importa". Aunque este paquete no varía su previsión de PIB para el país, Berenberg reconoce que sí introduce "cierto sesgo alcista".
"Seguimos esperando que, después de una caída acumulada de aproximadamente un 14,5% en la primera mitad de 2020, el PIB alemán vuelva a su nivel inicial de finales de 2019 a mediados de 2022. El paquete no cambia nuestras previsiones para el PIB alemán, con una contracción del 7% en 2020 seguida de un crecimiento del 5,8% en 2021 y del 2,4% en 2022. Sin embargo, introduce un cierto sesgo alcista en nuestras estimaciones", señala la firma alemana. En todo caso, Berenberg considera que Alemania se recuperará comparativamente bien de la recesión producto del Covid-19, con poco daño duradero a largo plazo.
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El paquete aprobado por Alemania incluye financiación para las industrias con dificultades, fondos adicionales para los municipios alemanes, que deben hacer frente al creciente desempleo y a la pérdida de ingresos fiscales a causa de la Covid-19, y un bono único de 300 euros por niño dirigido a las familias, que se pagará junto a otras prestaciones por tener hijos.
Además, se ofrecerán primas elevadas para alentar la compra de automóviles, pero el plan sólo se aplicará a los coches eléctricos, mientras los automóviles de gasolina y diésel se han dejado fuera.
"Uno de los elementos principales es un recorte temporal de la tasa estándar del IVA del 19% al 16% y de la tasa reducida del 7% al 5% para el segundo semestre de 2020, con un coste previsto de 20.000 millones de euros. Las empresas suelen trasladar una gran parte de estos recortes de IVA a los consumidores. Las expectativas de consumo deberían beneficiarse como resultado" de esto, explica Berenberg.
Desde la firma precisan que el paquete es un ejemplo de la capacidad de los políticos alemanes para llegar a un consenso. En este caso, los desacuerdos se han resuelto aumentando el montante destinado a ayudas, muy superior a los 80.000 millones de euros esperados.
