La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) considera que los impuestos sobre los combustibles deberían aumentarse para reflejar mejor las emisiones de CO2 y ir acompañados de una redistribución hacia los más vulnerables. Es una de las recomendaciones lanzadas para España.
También en materia de transición climática, cree que conviene acelerar los planes de inversión ya bien desarrollados en materia de ahorro energético, renovación de edificios y transporte sostenible.
La OCDE ha publicado el informe de políticas 'Going for Growth' en el que analiza las prioridades de reforma estructural que pueden ayudar a las economías a recuperarse de los shocks y ofrece a los responsables de políticas asesoramiento específico para cada país para crear las condiciones para una transición decisiva.
En lo que respecta a España, además, en lo que tiene que ver con la transición digital, la OCDE recomienda centros tecnológicos de apoyo, que llevan a cabo proyectos de I+D a través de asociaciones entre empresas, en particular PYME, e institutos de investigación. Y transferir una parte de los subsidios a la capacitación laboral a individuos y desarrollar programas de capacitación en TIC dirigidos a trabajadores poco calificados y de mayor edad.
En lo relacionado con los mercados de productos y de trabajo aconseja fomentar la implementación de la Ley de Unidad de Mercado para reducir las diferencias regulatorias entre regiones, eliminar gradualmente las regulaciones existentes que dependen del tamaño de las empresas según sea necesario y garantizar la plena portabilidad de los beneficios sociales y de vivienda entre regiones, profundizando la cooperación y proporcionando asistencia temporal por parte de la región de origen o del gobierno central.
En cuanto a la inclusión, protección social y envejecimiento, insta a apoyar la educación y el cuidado de la primera infancia y eliminar gradualmente los desincentivos fiscales para los segundos ingresos. También a crear ventanillas únicas para coordinar los servicios sociales y de desempleo y la atención a personas vulnerables, así como a fomentar la colaboración entre instituciones educativas y empresas en el diseño de titulaciones educativas y en el asesoramiento a los estudiantes para favorecer una mejor alineación entre los estudios y las necesidades del mercado laboral.
"Para asegurar un crecimiento sostenible más sólido, elevar los ingresos y los niveles de vida y, en general, impulsar las oportunidades, los responsables de las políticas deben centrarse tanto en una respuesta bien calibrada a las presiones inmediatas como en abordar los desafíos de las reformas estructurales a largo plazo", ha señalado el secretario general de la OCDE, Mathias Cormann, en la presentación del informe en Bruselas.
"Las prioridades de reforma varían entre países, pero todos se beneficiarán al aumentar los niveles de participación de las mujeres y los trabajadores de mayor edad en la fuerza laboral, impulsar la competencia, permitir una reasignación más eficiente de mano de obra y capital a empresas más productivas y aumentar los incentivos para innovar y asegurar la transición energética necesaria", ha añadido.
En general, 'Going for Growth 2023' proporciona un marco para una reforma política general en torno a cuatro pilares clave. En primer lugar, sugiere que los países mejoren el diseño de los programas de apoyo fiscal. En segundo lugar, orientar el crecimiento en una dirección más duradera, resiliente e inclusiva requiere medidas de política estructural para aumentar la participación en la fuerza laboral, particularmente de las mujeres. En tercer lugar, recomienda nuevas reformas de políticas para garantizar que la transformación digital conduzca a una mejora de la productividad. En cuarto lugar, insta a los gobiernos a avanzar más rápidamente hacia la descarbonización para alcanzar los objetivos de cambio climático.