"La perspectiva económica mundial es un poco más brillante a principios de 2023 de lo que pensábamos que sería hace solo dos o tres meses", ha señalado el secretario general de la OCDE, Mathias Cormann. No obstante, considera que los riesgos de inflación continúan persistiendo.
Así lo ha expresado durante una entrevista en 'CNBC', en la que ha destacado que "los precios de la energía y los alimentos son sustancialmente más bajos que en sus picos".
Además, los precios de la energía han caído significativamente porque Europa pudo diversificar "con éxito" sus fuentes de energía, a lo que se sumó un "invierno benigno", que ayudó a reducir la demanda de energía y mantuvo bajos los precios del gas.
Según sus estimaciones, prevé que la economía mundial crezca muy por debajo de los resultados esperados antes de la guerra: a un modesto 3,1% en 2022, antes de desacelerarse al 2,2% en 2023 y recuperarse moderadamente a un ritmo todavía inferior al 2,7% en 2024.
En cuanto a la inflación, reconoce que "está comenzando a disminuir", pero avisa de que "aún no estamos al tanto del desafío. Hay más trabajo por hacer para abordar la inflación y eso conlleva riesgos. Y estos son riesgos que deberán seguir gestionándose bien durante semanas y meses".