La OCDE (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos) ha defendido este martes que el PIB (Producto Interior Bruto) deje de ser la referencia económica principal a tener en cuenta.
Concretamente, la OCDE afirma que "se ha puesto demasiado énfasis en el PIB como la principal medida de la salud de las economías y las sociedades".
El organismo propone otros mecanismos que sirvan como termómetro de la economía
Además, el organismo asevera que "antes de la crisis, el PIB cegó a los responsables de hacer políticas ante los peligros que acechaban y los llevo a tomar decisiones equivocadas" y que " si no observamos lo que realmente importa, ya sea una desigualdad o la sostenibilidad ambiental, no podemos tomar las decisiones correctas".
Por ello, la OCDE propone 12 recomendaciones para avanzar en esta materia, entre las que se incluye instar a la comunidad internacional a invertir en mejoras de la infraestructura estadística de los países más pobres y medir la confianza y las normas sociales a través de herramientas como las encuestas.
Y es que el organismo concluye que "indicadores más adaptados a la inseguridad económica habrían revelado que las consecuencias de la recesión eran mucho más importantes de lo que indicaban las estadísticas basadas en el PIB".