Murcia, Comunidad Valenciana, Galicia y Aragón son las comunidades potencialmente más expuestas ante un aumento de los aranceles a las exportaciones al Reino Unido como consecuencia del Brexit. Todo ello por el peso relativo de su comercio con el mercado británico, pero también a su especialización exportadora, con un peso relevante de bienes agroalimentarios, textiles y de automoción a los que se les aplican unos aranceles relativamente altos en promedio.
Así lo afirma el organismo supervisor que dirige Pablo Hernández de Cos, el Banco de España, en el artículo analítico 'Empresas españolas que exportan bienes al Reino Unido: Rasgos generalizados y evolución reciente, por comunidades autónomas', elaborado por Eduardo Gutiérrez Chacón y César Martínez Machuca, de la Dirección General de Economía y Estadística del Banco de España.
En su artículo, estos autores señalan cómo, en términos agregados, la exposición comercial de España al Reino Unido es relevante, al ser este país el quinto socio comercial, con cerca del 7% del total de las ventas españolas de bienes al exterior.
Ante los posibles aranceles que conlleve la salida del Reino Unido en el acuerdo que negocia la Unión Europea con este país, tras hacerse efectivo su adiós a la Unión el pasado 31 de enero, el Banco de España señala cómo la exposición por comunidades presenta variabilidades significativas, siendo las más afectadas aquellas cuyas exportaciones están más sesgadas hacia productos agroalimentarios, automoción o textiles.
EMPRESAS MÁS PRODUCTIVAS Y DIVERSIFICADAS GEOGRÁFICAMENTE
En todo caso, este organismo advierte de que esta vulnerabilidad "se ve parcialmente amortiguada por nivel relativamente alto de productividad y grado de diversificación geográfica de sus exportaciones", pues estos índices, señala el Banco de España, son "en general más elevados que en aquellas empresas que comercian con los principales socios del área euro".
Así, analizando las características de las exportadoras españolas al Reino Unido, el Banco de España concluye que la característica más relevante es que presentan una productividad del trabajo mayor y un grado de diversificación geográfica de sus ventas más profundo que aquellas expuestas a Alemania, Francia e Italia, las principales economías del euro.
En términos de productividad, el diferencial es positivo para los que exportan, si bien se aprecia una heterogeneidad regional, ya que la brecha es positiva y significativa en Canarias, Asturias y Andalucía, pero sensiblemente negativa en País Vasco y Navarra.
Respecto a la diversificación geográfica, señala cómo la cuota media de las ventas de bienes al Reino Unido en las exportaciones de cada empresa es alrededor de 13 puntos porcentuales inferior al peso medio relativo de las transacciones destinadas a Francia, Alemania e Italia. Un rasgo que, añade, se extiende a la mayor parte de comunidades, con la excepción de la Comunidad de Madrid, Baleares, Extremadura, Murcia y Canarias.
CAÍDA DEL PESO DE ESTAS EXPORTACIONES DESDE EL REFERÉNDUM
Desde 2016, año en el que se celebró el referéndum que dio como resultado la salida de Reino Unido de la Unión Europea, el Banco de España aprecia una caída generalizada del peso relativo de este país tanto en exportaciones de bienes, lastradas por ventas relacionadas con el sector de la automoción y algunos alimentos, como en el número de empresas que exportan, concentrada en exportadores no regulares.
Sin embargo, los autores del artículo explican que estos desarrollos se enmarcan en un contexto de incertidumbre ligada al Brexit y de debilidad de la divisa británica, que además habría podido desincentivar la penetración de nuevos exportadores en este mercado.
En la mayor parte de comunidades se observa una disminución entre 2016 y 2018 del peso relativo total de empresas presentes en el mercado británico, consecuencia directa del aumento de diversificación geográfica.
El Banco de España, en todo caso, atribuye principalmente esta caída a la a reducción de aquellas con actividad no consolidada en este mercado, puesto que las que exportan regularmente (al menos cuatro años consecutivos) ha aumentado sensiblemente 6 puntos hasta el 60%, un aumento generalizado entre comunidades.