- Eleva su nota sobre el País Vasco hasta 'A3' desde 'Baa1'
- La agencia sí mejora a la ciudad de Barcelona, a la que sube hasta 'Baa1' desde 'Baa2'
La agencia de calificación Moody's, que el viernes pasado elevó su calificación sobre España hasta 'Baa1' desde 'Baa2', ha anunciado en las últimas horas varios cambios fruto de aquella mejora. Por un lado, ha subido la nota de los grandes bancos españoles y también de Aena. Además, ha comunicado la mejora del rating en un escalón de 15 Comunidades Autónomas españolas, para las que mantiene una perspectiva estable. En contraposición, reafirma su calificación 'Ba3' (bono basura), con perspectiva negativa, para Cataluña.
"Moody's ha elevado en un escalón las calificaciones de 15 Comunidades españolas. Las perspectivas de todas ellas permanecen estables. Al mismo tiempo, Moody's ha reafirmado su calificación 'Ba3' (bono basura) y las perspectiva sigue siendo negativa", ha explicado la agencia.
La agencia ha justiciado su decisión de mantener sin cambios su calificación de Cataluña por la "débil" posición fiscal de la región, reflejada en la presencia de unos niveles de deuda "muy altos", y por la persistencia de las tensiones políticas
Las mejoras de calificación se deben, según Moody's, al fortalecimiento del perfil de crédito soberano de España, que ha quedado reflejado en la mejora de calificación hasta 'Baa1' llevada a cabo el 13 de abril, y a la fuerte correlación entre el crédito de las Comunidades y el crédito soberano.
Moody's cree que la mejora de la solvencia de la deuda soberana de España se refleja a nivel regional y local dada esta fuerte correlación entre la deuda de las Comunidades y la deuda soberana y el apoyo extraordinario del Gobierno central a las regiones a través de un apoyo en liquidez que se mantendrá en los próximos años.
Moody's también nota una "mejora significativa" en la consolidación fiscal de las regiones en 2017, con una reducción del déficit regional para el año del -0,32% del PIB desde el -0,84% en 2016. "Este es un elemento positivo ya que es la primera vez desde el comienzo de la crisis financiera en 2008 que las regiones españolas han alcanzado colectivamente el límite de déficit objetivo impuesto por el Gobierno central", señala la agencia. A pesar de las elecciones regionales en 2019, Moody's cree que es probable que el déficit regional continúe disminuyendo en 2018 ya que el fuerte crecimiento del PIB refuerza los ingresos fiscales regionales.
MEJOR NOTA PARA EL PAÍS VASCO
Moody's fija su mejor calificación para el País Vasco, con un rating de 'A3' desde 'Baa1' que se sitúa, además, por encima de la calificación del país. Esta decisión se basa, según la agencia, en el particular régimen fiscal que tiene la Comunidad, "que actualmente les permite retener suficiente fortaleza crediticia para mantener sus calificaciones una muesca por encima de las del Estado", dice la agencia. "Además, el País Vasco y la provincia de Vizcaya tienen posiciones de liquidez cómodas, que limitan su riesgo de refinanciación. Tanto Vizcaya como el País Vasco registraron saldos operativos positivos y superávit de financiación en 2017, que se espera continúen en 2018", explica.
Para las regiones de Castilla y León, Galicia y Madrid, Moody's ha mejorado su nota hasta el mismo nivel que la del país, 'Baa1', mientras que Andalucía, Castilla-La Mancha, Extremadura, Murcia y Valencia también han visto mejorado su rating pero lo mantienen por debajo del nivel del de España. Así, Andalucía y Extremadura mejoran hasta 'Baa2' desde 'Baa3', mientras que Castilla-La Mancha, Murcia y Valencia lo hacen desde 'Ba2' hasta 'Ba1', y se mantienen dentro de la categoría conocida como 'bono basura'.
POR QUÉ NO MEJORAN CATALUÑA
Sobre su decisión de mantener Cataluña en 'Ba3', con perspectiva negativa, la agencia la justifica por la "débil" posición fiscal de la región, reflejada en la presencia de unos niveles de deuda "muy altos". A esto se suma la persistencia de las tensiones políticas entre la región y el Gobierno por la independencia de la región, explica Moody's, y recalca que esto está afectando a la economía de la región, "particularmente a la inversión extranjera directa".
La reafirmación de la calificación también se basa en el alto apoyo del Gobierno central a través del FLA (Fondo de Liquidez Autonómica) y en las expectativas de Moody's de que ese apoyo continuará.
En cuanto a la razón de mantener las perspectiva negativa, refleja, según Moody's, "la continua tensión política entre la región y el Gobierno central". Moody's espera que la inestabilidad política no resuelta tras las elecciones regionales del 21 de diciembre de 2017 continuará afectando negativamente el entorno comercial de la región, añadiendo presión a las finanzas ya débiles de ésta.
Finalmente, destacar que Moody's sí ha mejorado el rating de Barcelona, que ha elevado al mismo nivel que el del Estado (hasta 'Baa1' desde 'Baa2'). Esta decisión, explica la agencia, refleja "la buena administración presupuestaria de la ciudad y la solidez financiera de los últimos años, como lo demuestra la limitada deuda y el elevado saldo bruto de explotación".