Montoro defiende ante el Congreso los PGE como aval para "derrotar" a la crisis

Tras el rechazo inicial de los grupos de la oposición al proyecto del Gobierno, reflejado a través de las seis enmiendas a la totalidad presentadas, Montoro declaró su confianza en alcanzar un acuerdo en la jornada de este jueves, como ya consiguió el Partido Popular el pasado ejercicio pese a encontrarse en minoría.

Montoro inició su comparecencia recordando que la tardanza de estos presupuestos responde a la "grave crisis constitucional e institucional" generada por la Generalititat de Cataluña, y consideró el contenido del proyecto para este año como un "aval" para demostrar el correcto desarrollo de la economía española reciente.

El ministro aseguró que España se asoma a "uno de los escenarios más esperanzadores de su historia" tras alcanzar en 2016 y 2017 un Producto Interior Bruto (PIB) similar al anterior de la crisis. Además, Montoro recordó que el crecimiento económico del país se ha traducido en una creación de empleo, que es el gran motor de la igualdad, así como un gran momento financiero de las empresas españolas, gran generador de confianza e inversión extranjera. Un escenario que brinda a los españoles unas "posibilidades de prosperidad" impensables hace unos años. El ministro de Hacienda quiso recordar el mérito que supone crecer al ritmo actual manteniendo estables los precios, una situación que en el pasado se llevaba a cabo mediante las devaluaciones, algo imposible hoy dentro del marco de la Unión Europea (UE).

Montoro reiteró el buen funcionamiento de la Administración Pública central, así como las distintas territoriales, quienes cuentan con "grandes recursos" para apoyar el bienestar social. Asimismo, el escenario del mercado laboral es esperanzador en opinión del ministro, algo que ha permitido al Gobierno abordar temas sensibles como el aumento del sueldo mínimo interprofesional.

Del mismo modo, el mandatario reafirmó la intención de estos PGE de ayudar a 13 millones de personas incapaces de generar sus propias rentas, así como premiar a las fuerzas de seguridad del Estado, con quien el Gobierno tiene "una deuda pendiente"; y con los funcionarios, cuya mejora de salarios se verá reflejada en una mayor calidad de su acción laboral.

En cuanto a las pensiones, Montoro recordó que los presupuestos defienden una subida por encima del resultado del Índice de Revalorización de las Pensiones (IRP). Unas pensiones que suponen "el gran canal de solidaridad" entre generaciones y un alto reconocimiento a aquellos trabajadores que levantaron el país en condiciones "muy difíciles". Igualmente, el ministro negó la relación entre el déficit y la imposibilidad del Gobierno de hacer frente al pago de las pensiones, un debate que ya se sostuvo en la década de los 90' y que terminó por formalizar el Pacto de Toledo. "Las pensiones se van a pagar", garantizó Montoro.

En este contexto, el ministro recordó que la rebaja del IRPF beneficiará a los ciudadanos con rentas más bajas, entre los que se encuentran los pensionistas, además del plan para desarrollar ayudas fiscales a madres trabajadoras, familias numerosas y personas con discapacidad, que recoge estos presupuestos.