La gran prueba de fuego del nuevo primer ministro británico, Rishi Sunak, y de su ministro de Finanzas, Jeremy Hunt, ha llegado. Este jueves el Gobierno de Reino Unido presenta su presupuesto, y todas las miradas están puestas en el plan fiscal que ha elaborado el equipo de Downing Street para afrontar la inflación desbocada, reducir la deuda y contrarrestar los efectos de una recesión de la que el país no podrá escapar. El objetivo: recuperar la confianza de los mercados que saltó por los aires por los vaivenes de la anterior 'premier' Liz Truss en sus apenas 44 días de permanencia en el poder.
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Sunak planea aumentos de impuestos y recortes del gasto público para Reino UnidoTodos los expertos coinciden: esta Declaración de Otoño será clave para que Reino Unido siente las bases de una política fiscal creíble para los próximos años. "Se espera que el gobierno de Rishi Sunak ofrezca una combinación de subidas de impuestos y recortes de gastos que haga reflexionar", apuntan desde TwentyFour Asset Management (boutique de Vontobel).
"El gobierno del Reino Unido se siente obligado a demostrar sus credenciales fiscales con acciones. Antes, el mercado daba por sentado que el Gobierno aplicaría una política fiscal creíble. Ahora parece que se necesitan acciones en lugar de suposiciones", destacan por su parte los expertos de Bank of America (BofA), que creen que esto "restringe las opciones" de Sunak y los suyos, que tienen "menos capacidad para 'suavizar los choques', que es una contribución clave que la política fiscal puede hacer normalmente".
En su opinión, "si Reino Unido hubiera seguido creciendo a cualquiera de sus tendencias anteriores, el Gobierno tendría más margen de maniobra fiscal", pero no es así ya que "una serie de acontecimientos desafortunados y decisiones políticas han reducido el crecimiento potencial" del país, remarcan desde el banco estadounidense.
En Deutsche Bank esperan que la declaración fiscal del Canciller Hunt "destaque la dura realidad a la que se enfrentan las finanzas públicas, a medida que el choque de precios de la energía se desarrolla, los costes de los intereses se disparan y el contexto económico se deteriora significativamente". Eso, dicen desde la entidad germana, será clave para recuperar la confianza del mercado.
Estas son las principales medidas que esperan los analistas:
1. Consolidación fiscal (impuestos y recortes del gasto)
"Lo mejor que puede ofrecer el presupuesto es el control de daños, y los mercados se centrarán en si el agujero presupuestario de 50.000 millones de libras se cubre de forma creíble", resaltan desde TwentyFour Asset Management. Los expertos de Oxford Economics recuerdan que Hunt ya ha cancelado 32.000 millones de libras de los 45.000 millones de libras de recortes fiscales anunciados por su predecesor Kwasi Kwarteng, pero desde el Gobierno ya se ha dicho que se necesitará un "ajuste sustancial de la política fiscal" si se quiere cumplir con las reglas fiscales.
En Deutsche Bank creen que la principal medida que se pondrá sobre la mesa este jueves será la reducción de la deuda, ya que en el banco alemán estiman que el endeudamiento de Reino Unido superará los 90.000 millones de libras en 2026/27. "El mandato fiscal estará condicionado por una cuestión clave: reducir la relación deuda/PIB en los próximos cinco años", apuntan los analistas de la entidad.
Estiman que la "magnitud del reto fiscal" está entre 50.000 y 60.000 millones de libras esterlinas que el Gobierno de Sunak espera cubrir con recortes del gasto y subidas de impuestos en una proporción 60/40. Sobre la subida de impuestos, Deutsche dice que "lo más probable es que el Canciller Hunt centre sus esfuerzos de subida de impuestos en la congelación de las desgravaciones personales y los tramos impositivos", apuntan desde el banco. Estos expertos también ven "probable que se congelen en sus niveles actuales las exenciones fiscales para la mayoría de los tramos del impuesto sobre la renta, así como el impuesto de sucesiones, el de pensiones y el de dividendos".
Además, el Canciller podría buscar "reducir el umbral de impuestos de la tasa adicional de 150.000 libras esterlinas a 125.000 con el fin de recaudar más ingresos. Y lo mismo podría ocurrir con el impuesto sobre las plusvalías". Pero además, esperan también que se anuncien 'impuestos ocultos': hablan de "un aumento de los impuestos municipales que permita a las autoridades locales aumentar el nivel de los mismos por encima del 3% sin necesidad de un referéndum", y también de "un aumento tanto de la duración como de la escala del impuesto extraordinario sobre los 'beneficios excesivos' del petróleo y el gas".
Se ha hablado de que el Gobierno británico podría ampliar el impuesto sobre los beneficios extraordinarios de las energéticas dos años más (hasta 2027/28) y con un tipo más alto (pasando del 25% al 35%), lo que haría que entrasen en las arcas públicas otros 5.000 millones de libras.
En total, Deutsche estima que el impacto de la "carga fiscal" de los impuestos generen cerca de 35.000 millones de libras esterlinas, dada la mayor inflación y los elevados precios del gas y la electricidad.
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El PIB de Reino Unido se contrae un 0,6% en septiembre, más de lo previstoSobre el recorte en el gasto, Hunt podría intentar hacerlo "mediante la imposición de congelaciones nominales de efectivo en los presupuestos de los departamentos, y que los presupuestos de gasto se incrementen mínimamente en el futuro. También es probable que se recorten los planes de inversión en los próximos años", apuntan los estrategas del banco alemán. "En total, esperamos que se logren entre 20.000 y 25.000 millones de libras esterlinas de recortes del gasto en los próximos cinco años fiscales", remarcan.
Los analistas de BofA, por su parte, auguran que "la mayor parte de la contracción fiscal sea retroactiva, con efecto a partir de 2025/26", por lo que esperan que el endurecimiento fiscal "ralentice la recuperación del Reino Unido de la próxima recesión, en lugar de profundizar en ella". En cualquier caso, sus apuestas son las siguientes: "Suponemos que el ajuste fiscal se divide aproximadamente en un 40/60 entre subidas de impuestos y recortes de gastos. Suponemos que el Gobierno congela una serie de umbrales de impuestos personales a partir de 2025, recaudando 10.000 millones de libras al año hasta 2027/28. En cuanto al gasto, esperamos que el Canciller reduzca el crecimiento nominal del gasto de los departamentos al 2% anual a partir de 2025, por debajo del 3,7% previsto actualmente, lo que supondrá un ahorro de 24.000 millones de libras al año hasta 2027/28. Esperamos recortes de 7.000 millones de libras anuales en la inversión pública a partir de 2024/25", dicen.
Y continúan apuntando que creen que "será difícil mantener los actuales planes de gasto nominal, por no hablar de los años adicionales de estancamiento del gasto público en términos reales", por lo que auguran que la política fiscal "será más flexible de lo presupuestado, especialmente a corto plazo". Además, esperan que Reino Unido adopte "una regla fiscal laxa de reducción de la relación entre la deuda y el PIB en el quinto año de su previsión".
En BofA creen que el "agujero fiscal" al que se enfrenta Reino Unido es menor, de 30.000 millones de libras, pero creen que tanto Sunak como Hunt querrán "asegurarse en exceso", lo que significa que endurecerán la política por encima de ese nivel para "tener margen de error". En el banco estadounidense estiman un ajuste fiscal adicional de al menos 45.000 millones (alrededor del 1,5% del PIB) para 2027/28, lo que dejaría "15.000 millones de margen de maniobra frente a los objetivos de reducción de la ratio deuda/PIB".
No obstante, el ajuste podría ser aún mayor. Como dicen en BofA, hay riesgo de que se anuncie un "mayor endurecimiento de lo que suponemos", porque ahora mismo "casi todo parece estar sobre la mesa". Precisamente sobre este tema hablan también los estrategas de Oxford Economics, que apuntan en una nota que Reino Unido podría pasar "de una política demasiado flexible a una demasiado restrictiva", lo que "profundizaría la recesión que probablemente sufrirá el Reino Unido en 2023, aunque el retraso de las medidas podría mitigar el impacto".
En la firma británica creen que "un enfoque más sensato para el Gobierno sería retrasar fuertemente cualquier subida de impuestos y recortes de gastos", aunque reconocen que "la experiencia sugiere que esto podría tener un efecto corrosivo en el sentimiento", y precisamente lo que se busca ahora es recuperar la confianza de los mercados. Pese a ello, opinan que se tendría que "actuar con cautela a la hora de endurecer la política" porque "nuestras previsiones implican que solo se necesitaría alrededor de la mitad de la consolidación de 55.000 millones de libras esterlinas para situar la relación entre la deuda y el PIB en una trayectoria descendente en 2027-2028".
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La inflación de Reino Unido se desboca: supera el 11% en octubre, más de lo previsto2. Apoyo a la energía
Otra de las medidas que centrará la atención este jueves será la trayectoria que seguirá el Gobierno en lo que a energía se refiere. En Deutsche Bank apuntan que Hunt "tratará de impulsar una política que mantenga la inflación baja en los próximos trimestres", tras el máximo de 40 años que ha tocado en el mes de octubre, al dispararse hasta el 11,1%.
Para ello, dicen los expertos del banco alemán, podría anunciar "un freno al precio del gas (y de la electricidad) al estilo alemán, con precios de la energía limitados por el precio y el uso". Se puede esperar, dicen, algo muy parecido a lo que ha asumido el Banco de Inglaterra, con "alrededor del 50% del consumo medio de gas y electricidad de los hogares limitado a una tasa equivalente a 2.500 libras esterlinas anuales, y el resto cargado a tasas consistentes con el límite de precios de Ofgem".
Diversas informaciones apuntan que Hunt ha asignado ya 20.000 millones de libras en ayudas a la energía para los primeros seis meses del año fiscal 2023/24. Además de un apoyo general más limitado, "esperamos que el Canciller complemente los pagos del crédito universal para mantener el apoyo a la energía más específico. Un aumento de 1.200 libras en los pagos del crédito universal (un equivalente a un aumento de 20-25 libras/semana), en nuestra opinión, parece ahora probable (totalizando 10.400 millones de libras durante el próximo año fiscal)", comentan desde Deutsche.